Un paréntesis en plena temporada. Así se toma el Extremadura su fin de semana de descanso al no jugar competición por la exclusión del Reus en Segunda División. Los azulgranas, que ayer jugaron un amistoso en Valencia ante el Levante, terminaron su semana de trabajo y Manuel ha dado tres días de descanso a sus jugadores antes de volver el próximo lunes por la tarde al trabajo en la ciudad deportiva y empezar a preparar el difícil compromiso del domingo 31 de marzo en el Sadar ante Osasuna, que será líder ese día pase lo que pase en esta jornada.

El Extremadura no jugará sobre el verde, pero sí lo hará en otros cinco campos, justo en los partidos donde juegan sus más directos rivales por la permanencia. Teniendo en cuenta que el Extremadura sumará tres puntos y llegará a los 30, el objetivo se centra en terminar la jornada a un partido (tres puntos de la zona de salvación) y, a ser posible, dejar ya prácticamente sentenciados por debajo a Córdoba y Nástic de Tarragona.

Los que vienen por debajo tienen partidos difíciles. El Córdoba visita al Cádiz en el Ramón de Carranza sin dos de sus titulares: Touré y Carrillo, con compromisos internacionales. Y el Nástic recibe en su campo al Málaga, aspirante al título. Si pinchan, ambos se quedarán ya a dos partidos como mínimo del Extremadura, a falta de once jornadas.

Por arriba, sus rivales juegan todos en casa. El Lugo, del que está pendiente casi toda la afición, recibe el sábado al Albacete. Si el Lugo no gana, quedará a un partido del Extremadura. El Rayo Majadahonda recibe el domingo por la mañana al Numancia. Y el Tenerife abre hoy la jornada en su campo ante Osasuna.

EL AMISTOSO / El Extremadura jugó ayer su compromiso amistoso en el Ciudad de Valencia ante el Levante en un partido que perdió 1-0 con gol de Pedro López. Manuel utilizó el partido para dar muchos minutos a los jugadores menos habituales y sacar conclusiones sobre qué futbolistas le pueden aportar cosas en el tramo final de temporada. Una de las sorpresas agradables del partido fue el rendimiento de Diosbert Rivero, un delantero venezolano en edad juvenil que está marcando goles con el filial y que ayer probó Manuel en tierras valencinas. Diosbert no sólo se movió bien, sino que estuvo a punto de marcar hasta dos goles. El jugador, que ha llegado hace mes y medio del Llaneros de su país, es internacional sub 18 con la ‘Vinotinto’ y ha confesado que «mi sueño es jugar en el fútbol profesional y darle una mejor calidad de vida a mi familia, que no lo está pasando bien por lo que sucede en mi país».

Diosbert ha confesado que ha sido «un sueño» este debut con el primer equipo del Extremadura y se ha declarado fan de Enric Gallego: «tenemos condiciones parecidas. Fue una pena que a mi llegada él tuviera que marcharse, ya que me hubiera encantado haber trabajado a su lado y aprender mucho con él».

Tras el partido, los jugadores del Extremadura y del Levante se intercambiaron las medias y lucieron calcetines de diferente color, gesto con el que simbolizaban su apoyo al día mundial de las personas con Síndrome de Down. Mateu Lahoz, el árbitro, también se sumó a este detalle.

Manuel Franganillo, presidente del club, que ayer encabezó la expedición azulgrana en tierras levantinas, asegura que este tipo de partidos siempre son importantes para conectar con grandes clubes: «el mundo del fútbol es un pañuelo y este tipo de encuentros fortalecen relaciones con entidades de nivel».

En Almendralejo se quedaron entrenando algunos de los jugadores que no pudieron viajar a Valencia por diferentes circunstancias. Siguen recuperándose Schahin, Nando García y Javi Álamo. El delantero alemán tiene un leve esguince de rodilla y su concurso en Pamplona es difícil. Los servicios médicos intensifican la recuperación de Nando, cuyo concurso ante Osasuna se considera muy importante para los de Manuel.