Después de diez días de cuarentena, tres amistosos cancelados y un frenazo a la pretemporada, el Extremadura recupera cierta normalidad tras volver ayer por la tarde a los entrenamientos en la ciudad deportiva y salir de la crisis del coronavirus en la que se había metido tras detectarse hasta cinco contagios dentro de su plantel.

Una vez realizadas las últimas pruebas PCR a los jugadores de la primera plantilla, todos los futbolistas, miembros del cuerpo técnico y trabajadores del club dieron negativo en los test, por lo que regresaron de inmediato a los entrenamientos. Está previsto que los cinco integrantes que dieron positivo hace dos semanas (un jugador, tres miembros del cuerpo técnico y un trabajador del club) también puedan incorporarse a lo largo de este viernes, si los test PCR le dan un segundo negativo.

De esta manera, el Extremadura no verá cancelado el inicio de temporada que tiene previsto iniciar el domingo 18 de octubre en Don Benito.

SIN AMISTOSO /El club estaba intentando programar un amistoso para el fin de semana ante el Betis de Primera División, aprovechando también el parón por selecciones en la categoría, pero el cuerpo técnico finalmente ha descartado esta opción. Lo más probable es que no haya más encuentros hasta la primera cita oficial en el estadio Vicente Sanz.

No obstante, Manuel ha querido mirar la única parte positiva de todo esto y ha sido la recuperación de jugadores importantes como Jilmar y Owona, que prácticamente podrían estar ya a disposición del grupo. El camerunés, uno de los últimos en llegar, lleva diez meses sin jugar, pero evoluciona muy bien de su rodilla.

De otro lado, el club comenzó este jueves a repartir los nuevos abonos de la temporada. A día de hoy, el Extremadura ronda los 1.800 abonados, lejos de los 4.000 que espera la directiva conseguir según su plan.