El fútbol-sala extremeño da sus primeros pasos hacia una estructura que el alto número de aficionados a este deporte en nuestra región demanda desde hace años. La Federación Extremeña de fútbol ha puesto en marcha, por primera vez, un grupo de 1 B que con dieciséis equipos comenzará a disputarse este próximo fin de semana.
Las presiones de distintas instituciones y el exilio voluntario del Navalmoral F.S. al fútbol-sala manchego han terminado de convencer a la federación presidida por Juan Espino para crear el grupo 23 de la Primera División B nacional.
REFERENCIA CACEREÑA Este periódico viene informando de la trayectoria del equipo moralo que, superando muchas trabas, comenzó esta temporada a jugar en uno de los dos grupos de 1 B que existen en Castilla la Mancha. Se convertía el equipo de Navalmoral en el segundo equipo extremeño tras el histórico AD Extremadura de Cáceres que durante muchos años ha sido el único club de nuestra región que participaba en el fútbol-sala oficial y que juega en el grupo cuarto de 1 Nacional A.
Extremadura da el primer paso en un camino que debe llevarle a parecerse a su vecina comunidad manchega en la que hay equipos en todas las categorías: el Albacete en División de Honor, varios en División de Plata, presencia en dos grupo de 1 A, dos grupos propios de 1 B y ligas autonómicas de Primera y Segunda División, torneos de juveniles y hasta de cadetes. En Navalmoral se disfruta desde hace semanas del ejemplo manchego con equipos de fútbol sala, algunos incluso con filiales.
De momento seguirá el Trofeo Diputación cacereño, pero el fútbol sala extremeño tiene lagunas enormes en la cantera que lastran su futuro. La primera jornada será el fin de semana con los encuentros: Torremejía-Arroyo; Solana-Villalba; La Yedra-Independientes Caurienses, Suexal-Casar; Serfinex Coria-Malpartida; Tiendas Pavo-Almendralejo; Zorita-Mérida y Hermanos Conde de Cáceres-Almoharín.
