Si no hay novedad de última hora, Iosu Ortuondo va a poder contar con todos sus efectivos para el encuentro que el Extremadura disputará el próximo domingo (19.00 horas) ante el Aguilas. El lateral zurdo Alaín, que se perdió la primera sesión de trabajo semanal por un bocadillo en su pierna ha venido trabajando con normalidad y su concurso no va a representar problema alguno siempre que lo considere oportuno el entrenador. Del mismo modo, y a pesar de la entidad de la lesión que se produjo en el partido de la pasada campaña en el Alvarez Claros de Melilla, Samir Rico ve la luz al final del túnel y parece recuperado de su rotura. La mejor evidencia de lo anterior es que el joven capitán de la primera plantilla azulgrana se probó ayer jugando algunos minutos con el filial de Tercera División y no se resintió. Eso sí, le falta ritmo de partidos y buscar una óptima puesta a punto que le deje en igualdad física con sus compañeros a la hora de competir por un puesto en el equipo.

La plantilla azulgrana se entrenó ayer entre la Ciudad Deportiva y el estadio Francisco de la Hera, precisamente por ese partido que tenía que disputar el filial ante el Coria, y hoy tiene previsto realizar la tradicional sesión de baño y masaje de los viernes previa a la jornada.