La futbolista extremeña Marina García se proclamó ayer campeona de Europa sub-17 tras imponerse España a Francia en la final por la mínima (1-0) gracias a un gol logrado en el último suspiro del partido. La cacereña, del Comarca Llanos de Olivenza, ha conseguido un tanto durante la competición (en la victoria ante Islandia en semifinales) y ayer disputó los 80 minutos de partido.

Ambos equipos ofrecieron la máxima entrega en un duelo de alto voltaje que mascó intensidad y competitividad en cada acción durante los ochenta minutos de partido.

El primer cuarto de hora transcurrió sin demasiada actividad, y con un dominio de la situación por parte España, que instauró su filosofía, la filosofía de la Roja . Francia tardó en despertar, pero cuando lo hizo a punto estuvo de adelantarse, pues un disparo lejano de falta se marchó rozando la base del poste.

Francia no se sentía cómoda y sí España, aunque apenas se contabilizaron disparos en los primeros cuarenta de juego.

El segundo acto se inició con la misma protagonista del comienzo y con las españolas más enchufadas. Llegados al 60 de partido, los espacios se estrecharon y las imprecisiones, fruto del cansancio y la tensión, comenzaron a aparecer.

Pasaban los minutos y cada acción en ambos equipos espoleaba a los casi seis mil aficionados que abarrotaban el Colovray Stadium de Nyon. Y cuando todo parecía encaminado a los penaltis, Alba Pomares lograba el tanto de la victoria para el combinado español.