Enrique Ortiz y Jesús Perera. El primero, de Azuaga. El segundo, de Olivenza. El primero, del Cádiz; el segundo, del Celta. Ambos pueden ser hoy jugadores de Primera si sus respectivos equipos salen airosos de sus partidos. Los dos están siendo fundamentales en esta segunda vuelta, en la que están siendo titulares indiscutibles e incluso goleadores puntuales.

Será a partir de las nueve de la noche y, en el caso del Celta, el haber sido penalizado con tres puntos por alineación indebida les ha privado de un ascenso que ya festejaron el pasado fin de semana. Hoy, ante el Eibar, se espera que sea la ocasión definitiva. No estará Perera, sancionado tras ser expulsado en el pasado fin de semana.

El Cádiz buscará ante el Terrassa repetir la jornada histórica de 1977 en la que derrotó precisamente al conjunto catalán por 2-0, en el Ramón de Carranza, para ascender por primera vez en su historia a la máxima categoría de la historia.

El equipo de Enrique, exjugador del Cacereño, de donde salió la pasada temporada en el mercado de invierno, intentará volver a hacer historia tras la hazaña de 1977, la temporada en que la Betis logró la Copa del Rey y en la que el Liverpool se alzó con su primera Copa de Europa.

No obstante, los gaditanos necesitan la victoria ante el Terrassa junto a un empate del Almería, ante el Recreativo de Huelva, y una derrota del Eibar ante el recién sancionado Celta.

En previsión de los festejos que pudieran producirse, se ha preparado un dispositivo especial de 140 agentes que velarán por la seguridad de los espectadores por si hay celebración.

El Terrassa, que se juega toda la temporada en el estadio de Carranza, afrontará el partido ante el Cádiz con el hándicap de disponer de sólo 15 jugadores en un partido que únicamente le vale la victoria.

OTRA VEZ Mientras, el Celta de Vigo tratará de ratificar por segunda vez en una semana su ascenso matemático a Primera División, tras la decisión del comité de Competición de sancionar con tres puntos al conjunto gallego, para lo cual los celestes necesitan ganar al Eibar.

La decisión de la Federación Española de quitar a los celestes los tres puntos cosechados el pasado domingo (1-3) ante el Xerez, por alineación indebida del canterano Toni Moral, ha supuesto un duro golpe para los vigueses que, en apenas unos días, han pasado de festejar el ascenso a Primera a verse nuevamente en la obligación de ganar.