La liga española, pendiente de lo que ocurra el domingo, no se decide en la última jornada del campeonato desde la temporada 93-94, cuando el penalti fallado por el serbio Miroslav Djukic impidió la victoria del Deportivo y dio el título al Barcelona, con los mismos puntos que el equipo gallego pero con mejor diferencia de goles.

Desde entonces, el ganador siempre ha llegado al último partido con el título asegurado, aunque a veces las diferencias hayan sido tan pequeñas como los dos puntos que separaron a Real Madrid y Barcelona en la 96-97.

En la 93-94 la incertidumbre llegó no sólo hasta la última jornada, sino incluso hasta el último minuto de los decisivos partidos Deportivo-Valencia y Barcelona-Sevilla.

Mientras el Barcelona goleaba fácilmente al Sevilla (5-2), el Deportivo era incapaz de pasar del empate a cero ante un Valencia muy motivado.

Pero en el último minuto del partido el Deportivo vio el cielo abierto al señalar el árbitro un penalti que Djukic se encargó de ejecutar ante la negativa de otros compañeros.

El lanzamiento del serbio fue fácilmente detenido por el portero valencianista José Luis González. Minutos después se acabó el encuentro.

Esa era la tercera temporada consecutiva en la que el campeonato se decidía en la última jornada, pues las anteriores habían sido las dos Ligas de Tenerife , en las que el equipo insular venció al Real Madrid y facilitó así sendos títulos ligueros del Barcelona.