VALLADOLID: Alberto; Cifuentes (Víctor, min. 81), Baraja, Bea, Oscar Sánchez; Estoyanoff, Borja, Camacho (Vivar, min. 65), Sesma; Kome (Llorente, min. 56) y Ogbeche.
ATLETICO DE MADRID: Falcón; Valera, Pablo, Perea, Pernía; Luis García (Maxi, min, 65), Motta, Raúl García, Reyes (Simao, min. 56); Agüero (Cleber Santana, min. 82) y Forlán.
GOLES: 0-1: Min 48, Agüero. 1-1: Min. 70, Llorente.
ARBITRO: Iturralde González (C. Vasco). Amonestó a Ogbeche, Baraja, Motta, Perea, Falcón y Valera. Expulsó al entrenador del Valladolid, José Luis Mendilibar (min. 89)
El Atlético pasa a la siguiente ronda (1-1) en un partido que se decidió con una genialidad del argentino Sergio Agüero y que los madrileños sacaron adelante con mucho sufrimiento y cautela en un emocionante final, en el que el Real Valladolid echó el resto.
La igualada de hace una semana (0-0) dejaba todo abierto para este encuentro de vuelta y ninguno de los dos parecía dispuesto a firmar tablas. Físicamente, el Valladolid se presentaba más entero, pero es que los locales jugaron con once suplentes y los rojiblancos, con todo su arsenal.
Se notó, y mucho, la calidad de los madrileños mientras las fuerzas estuvieron intactas. Un disparo de Raúl García provocó la primera intervención del Alberto (min. 4).
En pleno cambio de signo del partido, el Valladolid tuvo su primera opción en el minuto 22, por medio de Ogbeche, que forzó con su remate una espléndida intervención de Falcón.
Oportunidades de Luis García, Kun Agüero, Ogbeche y Jonathan Sesma pudieron abrir el marcador poco antes del descanso, pero la primera mitad se saldó con un justo empate.
Nada más reiniciarse el encuentro, una aparición estelar del Kun Agüero sirvió para marcar las diferencias y un gol extraordinario. Dos toques, conducción de balón magistral y la rúbrica de un disparo cruzado para batir a Alberto (min. 48). Todo ello con una sencillez mucho más aparente que real.
Cuando todo parecía perdido para los vallisoletanos, Joseba Llorente prolongó la inspiración goleadora del domingo (tres goles al Recreativo) para meter el partido en un puño con un tanto de los suyos, de listo (min. 70).
A partir de ahí, apretó mucho el Valladolid, se protestó un posible penalti a Llorente y Forlán desperdició dos buenos contraataques para el Atlético, pero el empate permaneció igual.
