La arquera extremeña Fátima Agudo ha conseguido este fin de semana en Salamanca, de manera muy brillante, su decimocuarto título de campeona de España. La estadística demuestra, y sin temor a exagerar, que estamos ante una de las mejores deportistas de toda la historia en nuestra comunidad, aunque para desgracia de su especialidad no estemos ante un deporte de masas. Esta enfermera cacereña lo ha sido todo en el tiro con arco nacional y el próximo mes estará en el Mundial de Turquía en su enésima participación entre lo más granado del arco. No voy a pedir que el alcalde le dedique una calle --que si alguien la merece es ella, sin duda-- pero sí solicitaría a los políticos con capacidad decisoria que tuvieran más en cuenta modalidades menores como la que representa --y encumbra-- Fátima Agudo. Aunque solamente sea por los éxitos de gente como ella, el tiro con arco tendría que estar especialmente ´mimado´. Del fútbol regional, mientras, lo mejor es no decir nada.