El voleibol echa el cierre a la temporada 2019-2020. Si hace unos días la Federación Española anunciaba la conclusión de la Superliga, tanto masculina como femenina, a causa de la pandemia del coronavirus, ayer hizo lo mismo con la segunda división, la Superliga 2, con cuatro representantes extremeños, el Arroyo en categoría femenina y Cáceres Patrimonio, Club Pacense y Grupo Laura Otero de Miajadas en la masculina.

Los clubs extremeños entienden, la medida, aunque no la apoyan en los términos en los que se ha ejecutado. El Pacense se ha opuesto abiertamente, mientras que Arroyo, Cáceres y Grupo Laura Otero se han abstenido en la votación propuesta por la federación.

Aunque el Pacense en un principio entendió que la suspensión de las diferentes ligas era la decisión acertada, se opone a dar por finalizada la liga en estos momentos, «dado que las cuestiones propuestas no han sido resueltas y no se han concretado las medidas que desde el club se solicitaba que se aclarasen para finalizar la liga», explica en un comunicado. «Podría suponer enormes perjuicios deportivos y económicos a todos o algunos clubs si no se fijan con claridad los efectos de dicha decisió», manifiesta el club de Badajoz en su escrito a la Federación.

«Las distintas entidades deportivas manifestaron que debían conocer el futuro inmediato de la competición, para resolver contratos con sus deportistas y cuerpo técnico, si este fuera el caso, para adquirir un posicionamiento adecuado a corto y medio plazo», añade el Arroyo.

A este respecto, desde el club arroyano se insiste en que aunque se entiende y acata, «como no podía ser menos», la decisión, no deja de ser «sorprendente» que no se conozcan «ciertas situaciones de régimen administrativo».

«Somos conscientes de que son momentos difíciles y complicados, pero es evidente que debemos conocer ciertos aspectos de cómo queda la clasificación, para empezar a diseñar ya la próxima temporada, y sobre todo ciertas situaciones administrativas no resueltas en este momento».