Los partidos entre el Femenino Cáceres y el Granada están malditos. A finales de noviembre, el duelo que se iba a jugar en la ciudad andaluza (jornada 5 de la Liga Reto Iberdrola) se aplazó por varios positivos en covid-19 en el conjunto nazarí. El de este domingo (jornada 11) tampoco se disputará tras detectarse de nuevo un caso de coronavirus en el club granadino.

El de este domingo era el primero de los dos partidos seguidos que el Femenino Cáceres jugaría ante el Granada, ya que el domingo 31 de enero está previsto disputar el duelo correspondiente a la jornada 5. En principio, ese partido se mantiene y habrá que buscar una nueva fecha para el encuentro que se aplaza ahora.

Con este son ya cuatro los partidos que ha tenido que aplazar el Femenino Cáceres, que tiene en la falta de continuidad uno de sus principales lastres de la temporada. Este miércoles, precisamente, recuperó uno de esos encuentros. Fue en La Solana, donde el club cacereño solo pudo sumar un punto. «Merecimos la victoria, pero al menos hemos podido sumar un empate, reconocía al final del encuentro el técnico del conjunto extremeños, Ernesto Sánchez.

Según el análisis del preparador, el Femenino Cáceres sufrió por la adaptación al campo de La Moheda. De grandes dimensiones y césped natural, en principio podía favorecer los intereses del conjunto extremeño, aunque el mal estado del firme, con mucho barro, acabó perjudicándole. «Nos ha costado adaptarnos, las jugadoras se resbalaban mucho y eso nos ha condicionado bastante». En la segunda parte el equipo mejoró y además del gol del empate (1-1) estrelló tres balones en el larguero.