El asturiano Fernando Alonso y sus 100.000 seguidores intentarán este fin de semana en el circuito de Catalunya, escenario de Gran Premio de España, terminar con la supremacía demostrada hasta ahora por el alemán Michael Schumacher (Ferrari) vencedor de las cuatro primeras pruebas de la temporada.

El trabajo de Fernando Alonso, que provocará un nuevo récord de entrada en el circuito de Catalunya, se espera que puedan llegar a 110.000 espectadores los que acudan el domingo, si el buen tiempo lo permite, va resultar más duro que el del pasado año, en el que finalizó en segunda posición tras Schumacher.

El problema es que hasta ahora, en los cuatro grandes premios que se han disputado, los Ferrari de Schumacher y del brasileño Rubens Barrichello se han mostrado intratables y no parece que esa ventaja vaya a disminuir en Barcelona, pero además los BAR-Honda del británico Jenso Button y del japonés Takuma Sato, se han convertido en la segunda fuerza.

El Renault R24 de Alonso no presentará ninguna novedad. Rodará en la misma configuración que hace dos semanas en Imola y contará con la evolución del motor que debutó allí. El trazado favorece la buena aerodinámica y ése es un punto fuerte de Renault y eso le puede ayudarle a lograr un buen resultado que contente a sus seguidores.

Motivado

En esa línea fueron sus declaraciones de ayer. "Estoy muy motivado porque este año hay más gente, mas seguidores míos, más color azul en las gradas y tengo unas ganas enormes de salir a la pista, porque solo ocurre una vez al año y cuando la vives hay que disfrutarla", dijo Alonso, que el pasado año fue segundo.

"Me gusta correr con público e incluso en algunos circuitos en el extranjero, en los que veo que hay dos o tres banderas españolas, cuando llego a esa curva la hago siempre a todo lo que puedo, así que aquí será la vuelta completa y me gusta", añadió el piloto.