Como marcan los cánones de los grandes campeones, caminando por el torneo de menos a más, España ya se encuentra en la final de la Eurocopa sub-21 de Italia y San Marino. La Rojita se dio otro homenaje ayer para remontar el duelo ante Francia (4-1) en Reggio Emilia y citarse el domingo con Alemania, que batió a Rumanía en la otra semifinal (4-2). Será la reedición de la final del 2017, cuando los germanos se proclamaron campeones en Polonia (1-0).

Llegó algo tarde España al torneo pero ha derribado la puerta con una fuerza y talento devastadores. El domingo tendrá la oportunidad en Udine (20.45 horas) de lograr su quinta corona continental de la categoría tras las de 1986, 1998, 2011 y 2013.

Es sensacional la metamorfosis de una selección que empezó su aventura con una derrota ante Italia (3-1) en una clara encerrona que no afectó a la mentalidad de una generación admirable. Ante Bélgica (2-1) ya aparecieron síntomas de mejora, pero fue la goleada contra Polonia (5-0) la que acabó de poner en el escaparate a una España repleta de talento. En esa mutación destaca el magnífico trabajo de Luis de la Fuente, que siempre ha intervenido para mejorar. Su decisión de prescindir de Mayoral para apostar por los jugones, con Oyarzabal de falso nueve, ha sido determinante.

Sellado el pase a los JJOO de Tokio del 2020, tocaba tumbar a Francia para aspirar al título. Con Didier Deschamps en las gradas, los bleus se adelantaron con un penalti cometido por Junior, uno de los cambios del once junto a Vallejo. Antes del empujón del carrilero del Betis, Olmo pidió penalti por unas manos que el árbitro pasó por alto. Matetá batió a Sivera en la pena máxima. Poco después, el meta del Alavés se agigantó ante el goleador francés para evitar el segundo.

Solventado ese susto, la selección empezó a carburar de maravilla. Las tablas llegaron tras un córner rematado por partida doble por Marc Roca. Con una cláusula de 40 millones, nadie debería descartar una salida del brillante mediocentro del Espanyol. Justo antes del descanso Oyarzabal provocó un penalti que transformó el mismo.

El dominio español continuó en una segunda parte que empezó de maravilla con el tanto de Olmo a pase de Fabián. Todo le salía bien a una Rojita desatada. Marcó, incluso, Mayoral, que entró en el minuto 62 y selló dos minutos después el cuarto tras un maravilloso pase de Fornals.

La victoria refuerza la dinámica positiva de una selección que volverá a topar con Alemania en en la final. No debería confiarse España ante un potentísimo rival que ayer levantó un 1-2 con tres goles en la segunda parte.

ESPAÑA4

FRANCIA1

3Goles: 0-1, m.15: Mateta (penalti); 1-1, m.28: Roca; 2-1, m.45+3: Oyarzabal (penalti); 3-1, m.47: Olmo; 4-1, m.67: Mayoral.

3Árbitro: Georgi Kabakov (BUL). Amonestó a los españoles Firpo, Fabián, Aguirregabiria y Nuñez y a los franceses Mateta y Thuram.

3Estadio: Mapei Stadium.

3España: Sivera; Aguirregabiria, Vallejo, Núñez, Junior; Marc Roca, Fabián (Merino, m.85), Ceballos (Soler, m.74); Dani Olmo, Fornals, Oyarzabal (Borja Mayoral, m.63).

3Francia: Bernardoni; Dagba (Amian, m.23), Upamecano, Konaté, Ballo Touré; Tousart (Dembelé, m.58), Guendouzi, Aouar, Reine Adelaide; Ikoné y Mateta (Thuram, m.71).