La venganza de los Piquet contra Flavio Briatore toma cuerpo. A raíz de las acusaciones secretas del padre de piloto despedido por hace tres semanas atrás, la escudería ING Renault F1 ha sido llamada a comparecer ante la Federación Internacional del Automovil (FIA), en una reunión extraordinaria que tendrá lugar el 21 del presente septiembre, en París. La escudería deberá responder a la graves acusaciones sobre una supuesta manipulación en el resultado del GP de Singapur, aunque no han trascendido sobre qué pruebas apoyan su acusación. La sanción podría ir desde una reprimenda a la exclusión del Mundial.

"Entre los cargos, se incluyen la infracción del artículo 151c del Código Deportivo Internacional y el de haber conspirado con su piloto, Nelson Piquet Jr, para causar un accidente deliberado en el GP de Singapur de 2008 con el objetivo de provocar la salida del safety car para dar a ventaja al otro piloto, Fernando Alonso", dice el comunicado.

El artículo se refiere a cualquier conducta fraudulenta o acción que perjudique los intereses de cualquier competición o del deporte. Según la cadena O Globo, el hijo del tricampeón del mundo podría haber provocado, obedeciendo órdenes de su equipo, el accidente que facilitó la victoria de Alonso.

El accidente, que Nelsinho ha declarado que fue culpa suya, hizo que saliese a la pista el safety car con Alonso habiendo realizado ya su entrada en boxes, por lo que pudo tomar el mando de la carrera y lograr su primera victoria del año. Nadie dudó entonces del triunfo del bicampeón.

Renault, que no hará comentarios hasta el día de la vista, sufre otro ataque frontal de la FIA. Max Mosley no perdona a Flavio Briatore que encabeza la rebelión que propició su renuncia a seguir al frente de la FIA.

Hace varias semanas ya tuvo que enfrentarse a la sanción de no correr en Valencia tras permitir que Alonso saliese de boxes de Hungría con una rueda mal ajustada, sanción que fue conmutada por una multa económica tras la apelación del equipo.

El asturiano ofrece hoy una exhibición a los mandos de un F-1 en Oviedo y ayer visitó las obras del complejo deportivo que lleva su nombre e incluye una pista de karting, una aula de seguridad vial y un museo. H