Atlético de Madrid B - 1: Iago; César Ortiz, Regalón, Pulido, Javi Cantero; Koke, Sergio Marcos (Atienza, min. 72); Vitor (Perea, 86I), Noguera , Mínguez ;y Collado (Borja, min. 77).

Cacereño - 0: René; Palero, Rives, Tomás, Dani Gómez; Lolo (Gonzalo, min. 72); Abel Segovia (Juanín, min. 56), Rocha (Alex, min. 66); Luismi, Mauri y Chapi.

Gol: 1-0, (min. 27): Regalón.

Arbitro: Burgos Bengoetxea (Colegio Vasco). Amarillas a Vitor y Perea; a Abel Segovia y Rives. Roja directa al entrenador visitante José Luis Montes (89I).

Incidencias: Cerro del Espino. Unos 1.000 espectadores, 100 del Cacereño. En la grada, Santi Denia, seleccionador español sub-16 e Ignacio Camacho, jugador de la primera plantilla atlética, entre otros.

El Cacereño vio frenada su gran racha de resultados en el Cerro del Espino al caer derrotado por la mínima. Es la primera derrota que recibe José Luis Montes desde que se hizo cargo del banquillo extremeño, en lugar del exjugador del Atlético Manolo Sánchez Delgado. Hasta el momento llevaba cuatro victorias y dos empates en los seis encuentros disputados, 14 puntos de los últimos 18 posibles. De este modo el filial rojiblanco aprieta un poco más la zona de abajo y no le permite al conjunto verde distanciarse de los puestos de abajo. El conjunto de Cáceres se queda a un punto del descenso, mientras que los colchoneros se quedan a un punto de la permanencia.

La primera derrota de la era Montes en el Cacereño llegó en un pésimo partido de los extremeños. En casi ningún momento del encuentro supieron hacerse con el dominio del juego y estuvieron a merced de los colchoneros. Solamente la mala puntería de los pupilos de Rivas hizo que los visitantes no se fuesen con más goles en su casillero.

En el inicio del partido, ninguno de los dos equipos logró hacerse con el domino del juego. Los rojiblancos intentaban controlar y mandar en el partido mientras el Cacereño buscaba transiciones rápidas para plantarse en la meta contraria. Unas transiciones que siempre se chocaban con la potente defensa del Atlético B. El dominio del filial tampoco era muy fructífero y la única ocasión clara fue un cabezazo de Collado a centro de Mínguez. Después Koke gestionó mal una contra y su disparo se marchó fuera.

Según iba transcurriendo el encuentro, la posesión de balón de los colchoneros iba creciendo, mientras que las transiciones rápidas del Cacereño se iban convirtiendo en balonazos cada vez con menos sentido. Los pupilos de Rivas habían adelantado las líneas y cada vez era más asfixiante la presión que ejercían en la salida de balón del equipo contrario. Los rojiblancos tenían a su triángulo mágico en el centro formado por Koke, Sergio Marcos y Noguera que se impusieron a la medular cacereña. Sin embargo, el único bagaje ofensivo era otro cabezazo de Collado.

EL GOL Antes de la media hora llegó el único gol del encuentro. Mínguez bota un córner desde la izquierda para que Regalón, casi en el punto de penalti, enganchara una sensacional volea que se cuela cerca de la escuadra defendida por René. Todo un golazo, pero en el que se percibió una gran parsimonia en la zaga visitante que había dejado rematar solo a un jugador en el área. Un error de bulto atrás.

El gol espoleó algo a los visitantes, que volvieron a tener contacto con el balón después de unos minutos en los que sólo habían perseguido sombras.

Las ocasiones más claras llegaron precisamente en esos minutos. La primera fue una jugada en banda de Luismi en la que finalmente no pudo centrar y el balón se marchó fuera y después un disparo lejano de Rocha que no inquietó la portería de Iago Herrerín. El Cacereño lo intentaba por entonces, pero sin éxito ante la meta colchonera, para desesperación de sus aficionados.

SEGUNDA MITAD Tras el descanso, el Cacereño salió un poco más arriba y eso propició buenas contras de los locales, la primera fue un mano a mano de Collado con René que le sacó el portero con una buena mano. La respuesta fue un disparo alto de Lusmi tras una dejada de Mauri tras un saque de esquina. Después Palero le quitó casi de las botas un pase de la muerte que Vitor solo tenía que empujar.

El conjunto colchonero estaba decidido a sentenciar y Rivas sacó a Borja que reaparecía seis meses después de lesionarse con el primer equipo.

El primer balón que tocó obligó al portero a hacer una estirada espectacular que estuvo a punto de ser el 2-0. En la siguiente jugada fue Noguera el que estrelló un balón en el palo tras un disparo desde la frontal. A todo ello, Montes movió el banquillo con cambios de jugadores claves como Rocha, Lolo o Abel Segovia. Aquello no funcionó.

Los cacereños respondieron y pusieron emoción a los últimos minutos con un disparo de Mauri que se marchó fuera por poco y un posible penalti sobre el juvenil Alex que el colegiado no interpretó como tal y que generó la protesta entre los jugadores y los aficionados del Cacereño.

Los rojiblancos respondieron con un mano a mano de Perea y un piscinazo del mismo por el que el colegiado le mostró la tarjeta amarilla. La emoción se conservó hasta que el colegiado no pitó el final.

Fue un triste final para los verdes, que también vieron cómo fue expulsado el entrenador, José Luis Montes, por protestar al colegiado y mostrar su enfado.

También se resignaron los aficionados del Cacereño que viajaron a ver el encuentro, y que vieron cómo se frenaba una racha excelente de los extremeños.