Con la derrota del domingo en el Romano frente al Córdoba B (1-2), el Mérida vio cortada su racha positiva de cuatro victorias consecutivas. Esos doce puntos conseguidos de los últimos quince posibles han hecho que los emeritenses se coloquen a cinco puntos del cuarto clasificado y a otros cinco de quien marca la promoción de descenso, precisamente su último rival, el Córdoba B.

Esta equidistancia entre la gloria y el infierno demuestra la gran igualdad reinante en el grupo. No en vano, el Mérida está empatado a 23 puntos con otros dos equipos que también empezaron muy mal la competición como son el San Fernando y el Atlético Mancha Real. Este último será el próximo rival de los romanos el domingo (18.00 horas) y llega cargado de confianza tras enlazar cuatro victorias consecutivas.

A la espera de cómo vayan evolucionando los entrenamientos de la semana, Eloy Jiménez podrá contar con toda la plantilla para el domingo, una vez que recupera a Javi Chino tras cumplir el partido de sanción por acumulación de tarjetas. Llegarán apercibidos a la cita el central Mongil y el mediocentro, Pardo. La plantilla emeritense entrenó ayer en Calamonte y hoy tendrá jornada de descanso.