El exdirectivo Ramón Fusté presentó ayer en las oficinas del FC Barcelona una propuesta de voto de censura contra el presidente de la entidad, Joan Gaspart, y toda su junta, a consecuencia del "gravísimo" estado en que se encuentra el club, según ha argumentado el impulsor.

Después de presentar la propuesta en las oficinas, la entidad tiene cinco días para entregar unas nueve mil papeletas en las que el grupo de socios que promueven la moción de censura deberán recoger la fotocopia del carné de identidad, el número de carné de socio y la firma de las personas que den su apoyo.

ANTIC YA TRABAJA

De otro lado, la plantilla del Barcelona se puso, desde de ayer, en manos de Radomir Antic, el técnico serbio que deberá recomponer a un equipo azulgrana hundido en la decimoquinta posición y a sólo tres puntos del descenso.

"Espero que Antic pueda cambiar nuestra mala racha", manifestó el centrocampista Philip Cocu, quien añadió que el nuevo entrenador barcelonista tiene "una plantilla dispuesta a trabajar duro y como nunca para arreglar esta situación".

Antic ha podido comprobar la predisposición de sus jugadores desde la primera sesión preparatoria, pues al término de la misma destacó que, "aunque fue un primer entrenamiento algo descoordinado, el comportamiento de los profesionales ha sido superior". Del mismo modo, ayer se presentó al argentino Sorín.