En un triste y oscuro pozo de Segunda División B, sobreviven con más pena que gloria los herederos del fútbol extremeño. Hace una década, sus equipos fueron portada de los diarios nacionales enfrentándose a los clubes más grandes de la vieja Europa como el Real Madrid y el FC Barcelona, y hoy, luchan por no bajar a Tercera ante escuadras de localidades andaluzas y murcianas y frente a ellos mismos.

Es la historia de la decadencia del fútbol extremeño, que recuerda como si fuera un precioso cuento sus tres campañas de ensueño en la Liga de las Estrellas: 95-96 (Mérida), 96-97 (Extremadura) y 97-98 (Mérida). En la actualidad, los cuatro mejores de la tierra extrema y dura se conforman con estar en uno de los cuatro grupos del bronce.

Resurrección romana

El que mejor peldaño tiene en la escalera, el Mérida, se ha renovado tras desaparecer y aparecer de nuevo como las aguas del Guadiana. Los otros tres, Extremadura, Villanovense y Cerro de Reyes, se debatirán entre la vida y la muerte del descenso.

En Almendralejo el fútbol agoniza. El Villanovense sigue como equipo ascensor subiendo y bajando y el Cerro de Reyes ha llegado al rescate del fútbol pacense tras el bochornoso descenso del histórico y centenario Club Deportivo Badajoz, por un puñado de euros. El Cerro tiene un presidente enamorado del fútbol, saneamiento económico, posibilidades...pero el público le da la espalda y se va a ver al Badajoz de Tercera.

Cada año hay menos extremeños en Segunda B. En las cuatro últimas temporadas se ha pasado de seis a cuatro equipos. En la 03-04 hubo seis. El Badajoz (4º), disputaba la liguilla de ascenso, mantenían la categoría el Jerez (8º) y Extremadura (13º), y descendían a Tercera, Cacereño (17º), Mérida (18º) y Villanovense (19º). En la 04-05, cinco equipos. Badajoz (7º), Extremadura (10), Zafra (14) y descendidos Don Benito (18º) y Jerez (19º). Y en la 05-06, cuatro. Badajoz (7º), Mérida (9º) y Extremadura (11º) se mantenían y bajaba el Díter (20º).

Echando la vista más atrás cualquier tiempo pasado fue aún mejor. Además de los tres ascensos a Primera División, el Badajoz se mantuvo durante 11 temporadas en Segunda División, de la 92-93 a la 02-03 y junto a él, Extremadura y Mérida serían también dos clásicos hasta que la categoría se quedó huérfana de extremeños a raíz del descenso albinegro en junio del año 2003. Fue el principio del fin a.