Para José Manuel Calderón empieza una nueva vida en los Raptors. Una vida mucho más dulce y con un papel mucho más relevante que en sus tres años anteriores en Toronto. Empieza una temporada en la que estrenará titularidad y también contrato millonario después de una renovación esperada. Empieza una nueva etapa en la que lucirá con todo merecimiento galones de estrella.

"Estoy encantado de seguir en Toronto", explicaba el base extremeño, de 27 años y 1,91 de estatura a este diario la pasada semana en Los Angeles, donde los Raptors participaron en un torneo cuadrangular con los Lakers, los Clippers y el Barcelona. "Con esta ampliación de contrato todo cambia. Notas que la gente te respeta. Es un pasito más. Yo estoy encantado, la verdad. Ha sido complicado llegar a este momento después de tres años. Aquí tienes que ganarte el respeto aquí. No sirve nada de lo que hayas hecho fuera de la NBA y, una vez lo hayas hecho, notas el respeto de los rivales y de los árbitros y eso es importante", cuenta.

Los Raptors han planificado deportivamente la construcción del equipo pensando en Calderón, suplente hasta la pasada temporada de T. J. Ford, a quien la franquicia de Toronto traspasó a principios de verano y también han hecho un esfuerzo económico para contentar las peticiones del base titular de la selección que este año percibirá 7,4 millones de dólares (5,5 millones de euros), un sueldo que que se aumentará a 8,9, 9, 9,7 y 10,5 millones en las siguientes cuatro. Esas cifras le convierten en el tercer jugador mejor pagado de la plantilla después de los pívots Jermaine O´Neal, incorporado esta temporada de los Indiana Pacers, y de Chris Bosh.

"El dinero no supone ninguna presión para mí. Lo que he conseguido, sirve para que mi familia esté tranquila y eso es importante y además te da una seguridad que también te permite estar a tope", asegura sobre el tema económico. Tampoco le preocupa especialmente que su nuevo rol en el equipo le sitúe en el centro de las miradas. "No es algo que me quite el sueño.

Dinero y presión

"Siempre lo he dicho. Bendita presión la de jugar de titular. Bienvenida sea", confiesa el base de Villanueva de la Serena. "Yo me siento feliz en Toronto. Solo tengo que salir ahí y hacer mi trabajo, que es jugar a baloncesto. Debo salir a disfrutar y no darle más vueltas a si sale bien o sale mal. Tengo que hacer lo que hecho siempre, intentar hacerlo cada día mejor".

Ahora, Calderón mira hacia el futuro con ilusión y marcándose el objetivo colectivo de superar, al menos, la primera ronda de los play-off en un equipo que ha cambiado completamente su perfil con la marcha de jugadores relevantes como Carlos Delfino, Jorge Garbajosa, Rasho Nesterovic y T.J.Ford.

"El año pasado fue decepcionante no superar la primera ronda y ese es nuestro objetivo", cuenta el jugador español, que valora muy positivamente la llegada al vestuario de un jugador como el pívot Jermaine O´Neal. "Era el tipo de jugador que necesitábamos, un interior que pudiera jugar al poste bajo y muy bueno en defensa. Yo creo que su salida de los Indiana Pacers se produjo por una dinámica difícil, pero lo veo recuperado de su lesión".