El apretado calendario del torneo, que contará con el añadido de dar plaza a los seis primeros para la Copa del Mundo 2014 (España está clasificada como anfitrión) obligará a los finalistas a disputar 11 encuentros en 20 días y no dejará demasiado margen para el error. Los 24 equipos se repartirán en cuatro grupos de seis selecciones, que jugarán por un sistema de liguilla en una primera fase que clasificará a los tres mejores. La segunda fase reunirá a dos grupos de seis, con los tres mejores del A y del B en uno, y los tres mejores del C y del D en otro. Cada equipo jugará con los tres rivales con los que no se ha cruzado y se arrastrarán los resultados. A partir de esa fase se disputarán las eliminatorias directas.