Atlético Ciudad Lorquí - 0: Juanma; Dani, Chino, Joaquín, Mikel Méndez (Guille Roldán, 69), Juan Carlos, Aitor, Ortega, Alcántara, Félix Prieto (Abel Segovia, 55) y Gustavo (Edu Espada, 80).

Mérida - 1: Garavano, Samir, Jesule, Debris, Troyano, Stoeten, Chus Bravo (Víctor Bravo, 75), Ismael, Jandro, Enzo Noir (Machicado, 88) y Sabino (Miranda, 86).

Gol: 0-1 (81) Enzo Noir.

Arbitro: Del Olmo Codes (andaluz), Amonestó con la tarjeta amarilla a los locales Juan Carlos, Aitor y Edu Espada, y a los visitante Samir, Jandro.

Incidencias: Alrededor de unos 800 espectadores presentes en el estadio Juan Cayuela de Totana (Murcia), en partido correspondiente a la jornada 36 del Grupo II de la Segunda División B.

Un gol de Enzo Noir a nueve minutos del final supuso el triunfo del Mérida ante el Atlético Ciudad Lorquí en el Juan Cayuela (0-1), que le permite mantener intactas la opciones de jugar la fase de ascenso a Segunda División.

Durante el inicio fueron los emeritenses los que se situaron mejor sobre el rectángulo de juego, llevando la iniciativa del juego y acercándose con peligro hasta el portal adversario con dos lanzamientos lejanos de Stoeten y Sabino, saliendo ambos desviados de los dominios de Juanma.

Por su parte los murcianos se mostraban siempre muy imprecisos y muy agarrotados, pareciendo acusar en exceso la responsabilidad de tener en juego la posibilidad de certificar casi con total seguridad su presencia en la fase de ascenso a la división de plata del fútbol nacional.

ORDENADOS La buena disposición táctica del técnico visitante maniataba las vías de acceso de los locales hasta el área contraria, teniendo como único recurso la velocidad y técnica del mejor hombre del Atlético Ciudad, Ortega, quien en un par de ocasiones se marchó de su par, aunque sus centros no encontraron finalmente rematador.

Atravesada la primera media hora de juego del encuentro de ayer en Totana, llegó una buena ocasión para el cuadro local mediante un remate de falta directa botada por Félix Prieto, al que solamente la excelente intervención de Matías Garavano evitó que se convirtiera en el primer tanto del choque.

Justo antes del descanso y con el equipo de Beto Bianchi atravesando por sus mejores momentos llegó una clara opción para el At. Ciudad, pero el remate de Gustavo fue detenido en última instancia por Garavano.

Tras la reanudación, el conjunto extremeño, cuyo técnico, Goran Milojevic, ya había anunciado que trataría de ir al ataque, se decidió a adelantar sus líneas una metros en busca de conseguir los tres puntos en juego (único resultado que le permitió albergar esperanzas de clasificarse para el play-off), lo que propicio que en el rectángulo de juego se crearan mayor espacios lo que también aprovechó el conjunto murciano para crear problemas.

El choque pasó de ser táctico a convertirse en vistoso para el espectador, ya que ambos se lanzaron en busca del tanto que les diera la victoria. Milojevic movió su banquillo, intentando dotar de mayor mordiente a los suyos, mientras que Beto más conservador esperaba con el once inicial.

DOBLE PELIGRO Enzo Noir e Ismael se convirtieron en los estiletes del Mérida, mientras que Ortega continuaba siendo el único referente de los suyos.

Atravesado el ecuador de la segunda parte llegaron dos momentos cruciales en el desarrollo del partido que pudieron influir en el marcador, ya que una caída del jugador local Ortega en el área fue reclamada como penalti, aunque el andaluz Del Olmo Codes, haciendo caso omiso a su asistente, no señaló el punto fatídico con el público y los jugadores locales protestando airadamente al colegiado por lo que habían considerado como una clara pena máxima.

Posteriormente una internada de Ismael, fue detenida con un derribo por Mikel Méndez, donde tampoco el colegiado quiso saber absolutamente nada. Cuando todo parecía que iba el choque finalizaría con empate inicial, Enzo Noir aprovechó una contra para batir a Juanma, consiguiendo un tanto que permite al Mérida colocarse a tan solo tres puntos de la liguilla de ascenso. Los extremeños, de cualquier modo, no dependen de ellos, sino que deberán vencer en los dos siguientes encuentros y que los que van delante fallen. Pero todo es posible, piensan en el Mérida, que sueña con esa opción.