EXTREMADURA B 4: Borja; Gori, Miguel, Christian, Soria; Víctor (Chuno, M. 60), Guti, Jardón (José Ignacio, M. 84), Acosta; Romero (Angel, M. 79) y Alex Real.

VILAFRANCA 1: Enrique; Manolo, Juan Pedro, J. Diestre, Juan Ignacio; Kike (Sánchez, M. 76); Gordillo, Chico, Flores, Queru (Julio, M. 79) y Antoñito (Barrios, M. 76).

GOLES: 1-0 M. 18: Juanma Acosta. 1-1 M. 26: Santi Flores. 2-1 M. 69: Guti. 3-1 M. 73: Alex Real. 4-1 M. 81: Alex Real.

ARBITRO: Pérez Bejarano (0). Amonestó a Miguel (31´), Christian (70´)/Gordillo (38´) y Juan Ignacio (56´).

Dicen que no hay mejor forma que salir de una crisis que con una goleada y justamente así puso ayer un punto y aparte el Extremadura B a su aciaga racha de las últimas jornadas. Hubo de trabajar ante un voluntarioso, y poco más, Villafranca. Pero al final tuvo la recompensa de cuatro goles a favor aunque Borja, que midió mal, tuvo que recoger un balón del fondo de sus mallas cuando igualó Flores.

A Juan Pedro, no es la primera vez en las últimas tres jornadas, le cambiaron los planes a última hora y hubo de prescindir de Pichi. Pero Acosta, Guti y, sobre todo, Alex Real, recogieron el testigo goleador con el que acabó una tarde absolutamente gélida en la Ciudad Deportiva.

Juanma Acosta, que había advertido enviando un balón al poste (m. 9) cuando ambos equipos intercambiaban golpes para medir sus fuerzas, convirtió en gol lo segundo que llegó a sus botas cruzando imparable (m. 18)

Sin embargo, el Villafranca, cuando intentaba reaccionar con más corazón que cabeza, se encontró con el error del meta local y Santi Flores firmó unas tablas momentáneas (m. 26).

SEGUNDA ENTREGA Así se llegó al descanso, con igualada a un gol en el marcador. Pero Guti, en un balón suelto al borde del área, colocó el cuero fuera del alcance de Enrique para desnivelar (m. 69) y solamente cuatro minutos después empezaba el festival Alex Real.

El nueve azulgrana cabeceó un centro perfecto de Romero desde la izquierda para el 3-1 y cerró luego el marcador empujando a la red un servicio de ángel (m. 81). Luego todo el mundo pidió la hora