Desde que llegó el nuevo entrenador del Mérida, Goran Milojevic, el pasado miércoles, no se ha cansado de repetir dos frases: "quedan seis finales" y "el primer objetivo es el próximo partido". En este sentido, seguramente al Mérida no le hará falta ganar esas seis finales para terminar entre los cuatro primeros, sin embargo, sí que va a ser clave el partido de esta tarde a partir de las 18.00 horas ante el Puertollano.
Tal y como reconoce el propio Milojevic: "todo lo que no sea ganar, no nos vale. Quedan dieciocho puntos en juego pero ganar este partido es muy importante por muchos motivos, sobre todo por la confianza y entrar en estas últimas cinco jornadas con la moral más alta". Una confianza que no sólo llegaría al equipo, sino también al entorno.
GUSTO POR EL BALON La manera de jugar del Mérida de Milojevic es otra de las incógnitas. Con respecto al dibujo, en el campo parece que va a haber pocas variaciones a lo ya contemplado a lo largo de la temporada. Sin embargo, al nuevo técnico le gustaría "un Mérida con posesión de pelota".
El problema es que eso depende también de las características del propio equipo y parece que este Mérida no está concebido para el juego que, en principio, quiere imponer el nuevo entrenador emeritense.
Por otro lado, el estado de Sabino es quien le está planteando más dudas al técnico de cara al once inicial, por si opta por jugar con uno o dos puntas. El Puertollano no podrá contar con el portero Rojas, Vicente ni Carlos Sanz, los tres por lesión.
