No faltaba casi nadie. El Palacio de Congresos de Mérida se vestía de gala para la ocasión. Deportistas y representantes de los clubs --y por supuesto muchos familiares-- acudieron a la cita y atestaron el recinto. Al final, todos ellos, luciendo ropa con el logo de Marca Extremadura, recibieron un diploma.

En un acto sencillo, presentado por el periodista Urbano García, lo más emotivo pudo estar en la intervención de la judoca Conchi Bellorín, que habló en nombre de todos los deportistas beneficiados por las ayudas. Alabó la "voluntad política" de la Junta y destacó las condiciones del Centro de Tecnificación de Cáceres, en el que reside y entrena durante los últimos cinco meses.

Tras su emocionado recuerdo al niño muerto en trágicas circunstancias en Azuaga, lecho luctuoso acaecido ayer tarde, el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, defendió la vigencia de la Consejería de los Jóvenes y del Deporte, ahora cuestionada por el PP, contó su experiencia personal en un vestuario de fútbol, donde insistió, una vez más, que se ha formado y se dirigió a los deportistas: "no os voy a pedir que ganéis; os pido que os superéis a vosotros mismos; casi os lo exijo, porque el dinero no es mío sino de la gente que paga sus impuestos y a ellos hay que responderles".

También intervino Saturnino González, responsable de Deportes del Ayuntamiento de Mérida, ante la ausencia por enfermedad del alcalde, Angel Calle. Alabó González la importancia que el gobierno municipal y también el regional al deporte. La fiesta del deporte contó con las actuaciones del grupo Laura, así como una exhibición de artes marciales en silla de ruedas.