El finlandés Marcus Gronholm (Ford) acabó líder la primera jornada del rally Acrópolis de Grecia, seguido del noruego Petter Solberg (Subaru), mientras el francés Sebastien Loeb (Citroen), gran favorito, fue cuarto, y el español Dani Sordo (Citroen) terminó sexto, aunque las diferencias son mínimas.

El australiano Chris Atkinson (Subaru), que de forma sorprende era líder en el ecuador de la etapa, tras marcar el mejor tiempo en dos tramos, en la segunda parte de la jornada no pudo mantener el nivel demostrado en la mañana y bajó hasta la tercera posición.

Los grandes favoritos a la victoria, Gronholm y, sobre todo, 'Seb' Loeb, se vieron perjudicados en la primera parte del rally por salir los primeros a los tramos, unos caminos con mucho polvo y piedras que les impedían ir tan rápido como los que salían detrás, ya que a medida que iban pasando los coches había menos 'suciedad' en la pista.

Los primeros en salir hoy a los tramos fueron Gronholm y Loeb y, por tanto, fueron los que 'limpiaron' los caminos de polvo y piedras a los pilotos que venían por detrás.

Éste es el motivo por el que en la primera parte de la prueba apenas pudieron estar entre los mejores tiempos, salvo el finlandés en el primer tramo de hoy en el que marcó el 'scratch'.

La primera etapa constaba de cuatro tramos que se pasaban dos veces, una por la mañana y otra por la tarde, salvo el Olympic Properties, que sólo se pasó por la mañana.

En la primera mitad de la carrera, la sorpresa la dieron los Subaru, con Atkinson como líder y que marcó dos veces el mejor tiempo, mientras Solberg se colocaba segundo con un mejor tiempo. Ambos se beneficiaron de su retrasada posición de salida.

Una vez se llegó al ecuador, los coches pasaron por el punto de asistencia, cambiaron los reglajes de los vehículos y, sobre todo, los tramos estaban más 'limpios', los teóricos aspirantes a la victoria volvieron a los primeros puestos, Gronholm se hizo con el liderato y Loeb pudo ascender desde la séptima posición hasta el cuarto puesto en la general.

Sordo, por su parte, salía hoy cuarto a los tramos. Y pese a que la suciedad que aún había en las pistas no le hacían del todo competitivo fue capaz de ser rápido desde la primera etapa.

El español, experto en asfalto, en las pruebas de tierra le cuesta entrar en competición. Siempre comienza muy retrasado el primer día y en la segunda y tercera etapa tiene que remontar.

Hoy, sin embargo, fue rápido desde primer momento e incluso marcó el mejor tiempo en la penúltima especial, con una décima de ventaja sobre Gronholm, y tercero en el último tramo. Incluso, durante mucho tiempo, estuvo en la general por delante del Loeb. Las distancias, mínimas entre los primeros, le permiten optar a todo mañana

Pese a la dificultades para las mecánicas y para los pilotos, las diferencias entre los seis primeros son mínimas. Gronholm es primero, con algo más de ocho segundos sobre Solberg, y nueve sobre Atkinson. Loeb es cuarto a 9,7 segundos, el finlandés Mikko Hirvonen es quinto a 10,3 y Sordo es sexto a 10,7.

Las distancias son mínimas en la cabeza de la clasificación, entre el segundo y el sexto ninguno cuenta con un segundo de ventaja o desventaja con el que le precede o le sigue, por lo que mañana habrá mucha batalla entre los pilotos por ascender posiciones.

La segunda etapa será la más larga de las tres que componen el rally, 148,08 kilómetros cronometrados. Se disputarán un total de ocho tramos, en realidad dos pasadas sobre cuatro especiales diferentes, y la jornada comenzará con el tramo de Agil Theodori de casi cuarenta y nueve kilómetros, que se volverá a pasar por la tarde. La octava y última especial comenzará las 18:17.