Estuvo cerca, muy cerca, Diego Costa de dejar con un jugador menos a la selección española en el Juventus Stadium de Turín el jueves pasado. Reina, el portero suplente, no dejó de reprocharle su actitud en el campo cuando el delantero hispano-brasileño realizaba la ronda pertinente de saludos a los integrantes del banquillo español nada más ser sustituido por Morata. “Te podía haber expulsado y lo sabes, ¿no?”, le dijo muy serio el guardameta del Nápoles a su compañero de selección sin dejar de chocar la mano tendida del sustituido.

Al día siguiente, el viernes, Costa cumplió 28 años y fue arropado y felicitado como correspondía por todos sus compañeros, tanto en el entrenamiento como en la comida realizada en la ciudad italiana antes de emprender el movido viaje a Skodër (Albania), a donde tardaron más de seis horas en llegar. Todo con el máximo aire de normalidad, como en el caso de Sergio Ramos, pero con una gran preocupación subyacente a causa de la actitud del delantero del Chelsea durante todo el tiempo que estuvo en el campo ante el equipo italiano.

TITULARIDAD

El más preocupado, el seleccionador, Julen Lopetegui, aunque dejara bien claro en su primera convocatoria que está dispuesto a correr los riesgos que conlleva la controvertida personalidad del jugador. “Sabemos como es y le queremos así”, afirmó el técnico vasco el día antes de confiarle la titularidad en el primer partido oficial que dirigía, contra Liechtenstein en León, donde Costa volvió a ver puerta por partida doble para arreglar un poco sus pobres números con la selección: tres tantos en 13 partidos disputados.

Contra Italia volvió a quedarse seco, enjaulado por el trío de centrales de la ‘azzurra’, y, lo que es peor, desató su frustración con marrullerías y provocaciones continuas a los rivales que bien pudieron la expulsión antes de que Lopetegui optará con una sustitución cantada. Brych le perdonó un primer manotazo a Bonucci, pero no hizo lo mismo con el segundo y pudo haberle mandado a la caseta a causa de un ligero cabezazo al central italiano y más tarde por seguir la jugada mandando el balón a la grada después de haberle señalado fuera de juego.

SEIS GOLES CON EL CHELSEA

No será por todo eso, sin embargo, por lo que el seleccionador le deje en el banquillo contra Albania después de haber contado con él como titular en los dos partidos oficiales disputados. Era algo queLopetegui tenía en mente de antemano y que solo una gran actuación de Costa ante los italianos hubiera hecho cambiar.

No fue el caso y será probablemente el madridista el delantero centro de la formación inicial, aunque sus números esta temporada no resistan comparación: seis goles en siete partidos de Liga con el Chelsea ha marcado el hispano-brasileño, y uno en otros tantos encuentros, aunque con la mitad de minutos, el atacante del Madrid.