La posible suspensión de la jornada del fin de semana por el conflicto federativo en el fútbol extremeño se disipa. Aunque a las 20.00 horas de hoy hay en Mérida una reunión entre los clubs de Tercera para decidir su postura, todo hace indicar que jugarán, pese a la división interna que arrastran.

En cuanto a los Judex, también se quieren despejar las dudas y, en principio, tendrán lugar en las distintas categorías con absoluta normalidad. Ya se ha advertido a los clubs 'rebeldes' que, si no se presentan, serán duramente sancionados por incomparecencia.

Se intenta conseguir que no cale el mensaje de que los partidos programados no serán oficiales y que carecerán de valor.

Según ha podido saber este diario, a quienes no se presenten en los horarios que se están configurando serán sancionados con la pérdida de los encuentros y con puntos en la clasificación, como mínimo.

La intención es que la huelga de los empleados de la Federación Extremeña y la simpatía que sienten por ellos algunos clubs no tenga repercusiones a nivel competitivo.