Sentimos que hemos hecho feliz a mucha gente que vive grandes sensaciones con este club y hay que celebrarlo por ellos". Son palabras del defensa del CD Badajoz, Antonio Chamorro, que comparten todos sus compañeros, impresionados por la respuesta de la afición pacense en la fase de ascenso.

El capitán Sandro Pereira expuso que este ascenso, "es lo más grande del mundo, poder dar a la afición lo que se merece. Se lo dedico también a los jugadores del Badajoz que subieron a Segunda en el 92 y que seguro lo están disfrutando como nosotros. Estamos locos de alegría, eufóricos. Aún no hemos llegado donde nos merecemos".

El lateral izquierdo Gabri Grille, junto a aficionados que llegaron desde Mallorca, argumentaba que "con este apoyo no nos parará nadie y hemos conseguido un ascenso importantísimo".

"Increíble, increíble, estoy muy contento, es imposible decirte cómo me siento", repetía el delantero gallego Abraham, abrazado a Adolfo Muñoz que estaba "sin fuerzas para expresar esta alegría tan grande", dijo el técnico para añadir que "son diez meses de trabajo y por la afición merecía la pena, hemos estado atacando todo el tiempo y merecimos ganar".

A unos metros, Cubi reconoció que "no nos esperábamos tanta afición, ha sido una locura y eso demuestra que Badajoz quiere fútbol y quiere estar en Segunda. Hemos estado serios en defensa y hemos marcado el gol del ascenso. Badajoz no puede estar más en Tercera".

El extremo pacense Ale Herrera afirmó que "nos lo merecíamos por la temporada que hemos hecho y gracias a la gente por animar así. Llevo casi 16 años en el club y este ascenso es un sueño. Ahora hay que disfrutar de la victoria, celebrarla, pensar en el verano y pronto de nuevo en la Segunda B".

Alberto Cajoto subrayó que "hemos tenido muchas ocasiones que no hemos aprovechado, pero al final hemos subido a Segunda B y gracias a todos".

Para el pichichi Toni, la clave fue que "el público nos empujó hasta que conseguimos el gol", un tanto marcado por Ruby, "muy contento por darle una alegría a tanta gente. ¿Qué pensé antes de tirar el penalti? La mente en blanco, engañé al portero, y ví cómo disfrutaba nuestra afición con el gol". Un gol de bronce, que permite a los jugadores del CD Badajoz cambiar de categoría, ya son de Segunda B.