Las molestias musculares que padece el francés Thierry Henry, quien con toda seguridad no estará con el Barcelona mañana en Montjuïc para jugar contra el Espanyol, posibilitará que el brasileño Ronaldinho tenga menos impedimentos para regresar a la titularidad, que perdió en el partido contra el Lyon.

El estado de Henry aún no se ha convertido en una cuestión mayor en el Barça, pero la nueva baja del francés ha puesto en alerta al club, ya que el jugador se perderá el segundo partido consecutivo, según el parte médico, como consecuencia de unas molestias musculares poco concretadas, y detectadas en el glúteo izquierdo.

Thierry Henry recaló en el Barcelona el verano pasado después de estar unos tres meses de baja, que le impidió jugar el último tramo de la Liga inglesa con el Arsenal.

A mediados de marzo, y tras el partido de la Liga de Campeones entre el PSV y el Arsenal, el entrenador del conjunto inglés, Arsene Wenger, informó de que el Henry causaría baja hasta el final de la temporada como consecuencia de unas dolencias estomacales y de abductores.

El periodo de adaptación del jugador al Barça, tanto en el apartado físico como en la compenetración con sus compañeros está muy lejos de satisfacer tanto al jugador francés como a la entidad, a pesar de los ochos goles que lleva marcados con la camiseta azulgrana.

DUDAS Debido a que el periodo de adaptación se está dilatando más de lo que en el club se esperaba, cualquier freno en el trabajo diario del francés resulta un problema para que entre definitivamente en el engranaje del del equipo de Frank Rijkaard.

La baja en el partido contra el Valladolid, tras padecer una peritendinitis, después de detectársele unas molestias en el tendón de Aquiles fue el primer aviso. La nueva ausencia ahora, sin día de reaparición a corto plazo, resulta un nuevo inconveniente, aunque en este caso el problema se agrava en el conjunto catalán, ya que Samuel Eto´o aún no ha recibido el alta médica, después de completar ayer tres meses de su última lesión.