Diego del Castillo volvió a marcar un gol que valía una clasificación justo dos años después. El Moralo prepara el partido del sábado frente al Linares (21.00, Municipal) con la atención que merece un choque de esta importancia. En una eliminatoria un gol puede ser clave, como ya se demostró en el cruce anterior con el Horta en el que un solo acierto anotador decidió el pase de los de Navalmoral a la segunda ronda.

El gol de Del Castillo (León, 1993) en Barcelona fue decisivo y eso que su función principal en el juego del esquema de Diego Merino no es precisamente la ofensiva. Sin embargo, ya ha superado ya en Navalmoral su marca personal como anotador con 8 tantos. El gol del sábado pasado ha sido especial para él por su trascendencia: «la verdad es que en la ida estuvimos mal en la estrategia -reconoce- y acertar en ese córner nos ayudó a encarrilar el partido ya que encajamos pocos goles y en defensa incluso llegamos a terminar el choque disfrutando».

Como curiosidad recuerda que el pasado fin de semana se cumplían justamente dos años de otro gol suyo en una fase de ascenso a Segunda B; en aquella ocasión con el Unionistas de Salamanca: «era también primera ronda y tras ganar 1-0 la ida el Águilas marcaron ellos en la vuelta hasta que hice el gol que nos clasificó». En segunda ronda les eliminó el Xátiva. Dejó entonces el equipo salmantino para jugar el año pasado en el Astorga, también a las órdenes de Diego Merino, como ahora en el Moralo donde sigue siendo una pieza clave. Ha jugado 36 partidos y solo una vez no fue titular, completando 32 enteros. Reconoce que «la temporada está siendo muy buena, tanto a nivel personal como con el equipo y seguimos aspirando a mejorarla».

Sobre el rival en la segunda eliminatoria tiene datos suficientes para pensar que será difícil superar: «es un club con medios, con presupuesto y con una gran afición -dice- conozco bien a Jorge Barba con el que coincidí en el Unionistas». El club jiennense anunció ayer mismo el fichaje del defensa Alex Carmona, procedente del Mancha Real, como recambio de su capitán Jonathan Rosales, lesionado de gravedad en la eliminatoria frente al Tenerife B.

Expectación en Navalmoral

La directiva del club de Navalmoral ha reconocido ya un buen ritmo en la venta de entradas para el Moralo-Linares del sábado (arbitraje del segoviano Néstor Holgueras Castellanos). Desde ayer se pueden conseguir (al mismo precio que en taquilla) para evitar colas el día del choque. Los socios pagan 7 euros y el resto de aficionados 12; este segundo precio es el que se ofrece a los aficionados andaluces para los que se reservan 300 entradas. Se ha descartado, por su alto coste, la instalación de una grada supletoria en el fondo libre del Municipal, donde se registrará seguro una gran entrada de público.

Igual que el resto de sus compañeros reconoce Diego del Castillo que será clave el apoyo de su afición verdiblanca: «con su ayuda tenemos que ganar para ir a Linarejos con más opciones de pasar. Ya hemos conseguido algo grande pasando una eliminatoria, pero no nos vamos a conformar».