Se repetía el vestuario una y otra vez que el objetivo estaba cerca. Que lo de clasificarse como invictos para la Main Round estaba a 60 minutos de cumplirse. Pero que el rival era más difícil de lo que parecía. Por eso, el Vamos, tíos tras el himno fue unánime. Y las ganas surtieron efecto. En uno de aquellos llamados partidos trampa, los 'Hispanos' se impusieron a la debutante selección de los Países Bajos (25-36) para certificar su pase a la siguiente ronda y, a la postre, vengarse de la derrota de las Guerreras en la final del Mundial.

España, acostumbrada siempre a ser la selección de los locos bajitos, la anarquía y la falta de envergadura, de repente se sintió gigante. Ante los neerlandeses, los de Ribera eran viejos rockeros de conceptos claros y dimensiones superiores. Y aunque el arranque costó, pronto apareció la España camaleónica capaz de adaptarse a cualquier situación. Paraba Rodrigo Corrales, percutían los extremos y la magia de Raúl junto a las penetraciones de Maqueda hacían el resto.

La intensidad hispana anuló la voluntad de los Países Bajos y Erlingur Richardsson se vio obligado a pedir tiempo muerto. De poco le sirvió. España, basando su juego en la tranquilidad, seguía robando, marcando y abriendo brecha. Las caras del banquillo neerlandés lo decían todo. Las decisiones de Ribera, también. Soplaban los integrantes de la oranje y el técnico español empezaba a rotar a los suyos. Aunque el despertar del rival estaba por llegar.

Exhibición en la portería

Los neerlandeses, que seguían con opciones de clasificarse para la Main Round, no dejaron de soñar. Apostaron por su mago Steins en el centro y empezaron a crear. El primer tiempo lo cerraron con un fly de Boomhouwer y 13-17 el tanteador. Era posible, pensaban. Y lo era porque en la chistera tenían el desparpajo de Steins. Eso es lo que pareció tras el tiempo de asueto, cuando los de Richardsson se sintieron más fiables de cara a portería.

Atacaban con tranquilidad, se fiaban de los pases de Luc y aprovechaban las contras para asustar a los Hispanos. Pero ya se sabe que si de algo va sobrada España es de guardametas. En juego estático detenía Corrales y Gonzalo se unía a la fiesta desde los siete metros. Y cuando el cerrojo está asegurado poco pueden hacer los magos.

Los Hispanos pasan a la Main Round con dos puntos y tras las hecatombes de las dos últimas campeonas del mundo, España ya suena en todas las quinielas. Francia ha hecho las maleta y Dinamarca vive pendiente de su marcha. El viaje de los españoles empieza ahora.

Ficha técnica

Países Bajos: Ravensbergen; Schagen (1), Sluijters (-), Benghanem (3), Schoenaker (-), Adams (-) y Boomhouwer (4) -equipo inicial- Eijlers (ps), Leenders (1), Luc Steins (5), Ivo Steins (-), Versteijnen (-), Smits (8, 3p), Jerry (1), Baijens (-) y Remer (2)

España: Corrales (1); Solé (2), Maqueda (6), Raúl Entrerríos (2), Dani Dujshebaev (3), Ariño (5) y Figueras (4) -equipo inicial- Pérez de Vargas (ps), Ángel Fernández (4), Alex Dujshebaev (1), Sarmiento (1), Aginagalde (3), Cañellas (2), Morros (-), Aleix Gómez (1p) y Gedeón Guardiola (1)

Marcador cada cinco minutos: 1-2, 2-5, 5-9, 6-12, 10-15 y 13-17 (Descanso) 15-20, 17-25, 19-27, 20-29, 24-33 y 25-36 (Final)