Se acabaron las pruebas y comienza la hora de la verdad para un Cáceres 2016 que inicia "ilusionado" su segunda temporada en LEB Oro con el reto de consolidarse en la categoría. Y lo hace ante un rival complicado, el Tenerife Rural, que ha disputado la final a cuatro de las dos últimas campañas, aunque igual que el conjunto cacereño, cuenta con una plantilla prácticamente nueva. El partido será en el pabellón insular Santiago Martín (22.00 horas).
El Cáceres inicia la competición con muchas dudas después de una pretemporada irregular, en la que ha perdido cuatro de los seis partidos que ha disputado, dos ante equipos de la misma categoría (La Palma y Vive Menorca), uno ante un LEB Plata, el Plasencia, y otro, el último, con el Benfica portugués. Aún así, el técnico cacereño, Manuel Piti Hurtado, espera que hoy los nervios y la ansiedad "no agarroten" a los jugadores. "Vamos a intentar soltarnos para hacer el mejor partido que podamos", dijo ayer antes de partir a Tenerife.
El equipo arranca, a priori, sin marcarse ninguna meta concreta esta temporada, aunque la vista de la afición está irremediablemente puesta, al menos, en los play off. "Queremos ilusionar", señaló Hurtado, que repitió en varias ocasiones que "hay que saber de donde partimos" en referencia a la mala pretemporada y a los problemas que ha tenido con las lesiones de los jugadores (Francis Sánchez, Pavel Ermolinski...), que solo le han permitido entrenar con la plantilla al completo la semana pasada (aunque sin la última incorporación, Perico Sala, que se fichó el pasado viernes).
SANGUINO, DE BAJA A pesar de las dudas, aseguró Hurtado que "el equipo está para salir a competir y es lo que vamos a hacer. Ahora no nos vamos a marcar objetivos, estoy centrado en la lectura corta. Hemos hecho la mejor plantilla que hemos podido", afirmó el técnico cacereño.
El equipo viajó ayer a Tenerife sin el pívot cacereño Juan Sanguino, que sigue recuperándose de su tercera rotura del tabique nasal, que le tendrá apartado otras "dos o tres semanas", dijo el entrenador. Por lo demás, están todos disponibles, incluido Perico Sala, "que llega para paliar la falta de velocidad y explosividad", apuntó Hurtado. Habrá que ver su estado de forma, al igual que el de Francis Sánchez, que hoy vuelve a la que fue su casa durante las tres últimas temporadas y donde antes del partido recibirá un homenaje del club y de una peña.
Enfrente, el Cáceres 2016 tendrá un Tenerife Rural muy renovado con respecto al de la temporada anterior, pero con mucha calidad en la línea exterior y con jugadores muy atléticos por dentro, los brasileños Bruno Fioroto y Atila Santos, llegados al conjunto tinerfeño este verano.
"Como nosotros --señaló Piti Hurtado ayer--, es un equipo por formar que también ha tenido muchas dudas esta pretemporada, del que estamos seguros que va a salir muy fuerte por jugar delante de su afición".
Un buen resultado hoy sería un espaldarazo moral a una plantilla que ha visto como el pasado mes de septiembre no le han salido las cosas como quería. Un buen inicio será fundamental para aspirar a más y satisfacer a una afición que volverá a estar con su equipo.
