Ni Maradona ni Ronaldinho ni Henry. Zlatan Ibrahimovic batió un récord de asistencia y de entusiasmo en el Barça como nunca se había visto antes. El delantero sueco congregó ayer en el Camp Nou entre 60.000 y 65.000 personas en las gradas, que aguantaron un retraso de dos horas para ver a la nueva estrella azulgrana sobre el césped. Más del doble que sus ilustres predecesores. Y aún no ha marcado un gol. Pero las expectativas que genera están a la altura de la dimensión de su fichaje, el más caro de la historia del club: 46 millones de euros más los 20 en que estaba valorado Samuel Eto´o. El camerunés hizo ayer el camino inverso hacia Milán y herederá la camiseta de Ibrahimovic, el nuevo 9 del Barça.

"Hay muchos clubs grandes, pero solo uno que sea especial y ese es el Barça", explicó el goleador sueco, quien se confesó "la persona más contenta" del estadio por recalar en el Camp Nou. Ibrahimovic confesó que había asegurado a Massimo Morattiu, el presidente del Inter, que solo se iría de San Siro para ir al Barça y el dirigente le dio su palabra de que lo haría posible si se daba la circunstancia.

EL PREFERIDO DE GUARDIOLA Y la circunstancia se dio porque Ibrahimovic, un delantero imponente (1,95 m. y 95 kilos) era el jugador preferido de Pep Guardiola para sustituir a Etoo. Una decisión "difícil" y aparentemente incomprensible, admitió Txiki Begiristain, el secretario técnico, como era la de pretender cambiar a un contrastado goleador --el tercero de la historia del Barça, con 130 tantos en 199-- por otro de la misma edad, con cualidades diferentes y que deberá pasar un periodo de adaptación. A la ciudad, al club y, sobre todo, al particular estilo futbolístico del Barça. "Guardiola solo quiere que sea feliz, y que si soy feliz él no tendrá ninguna preocupación", desveló Ibrahimovic sobre una conversación telefónica entre ambos.

"Es un futbolista casi perfecto, grande y con excelente calidad técnica", garantizó Begiristain. Formado en el duro y exigente fútbol italiano, que lo ha acabado de modelar hasta convertirlo en un sucedáneo Marco van Basten. Como le dijo un día Fabio Capello al propio Ibrahimovic, a quien enseñó un vídeo de 20 minutos sobre el estilo del exdelantero holandés uno de los mejores artilleros del fútbol mundial. Pero Ibrahimovic, sueco de nacionalidad pero de padre bosnio y madre croata no quiere comparaciones. Ni siquiera con Eto´o, el referente más cercano. Para él y para la hinchada, que vitoreó a Ibrahimovic con una espectacular demostración de fervor.

MAS DE 25 GOLES No se ha trazado otra meta que superar los 25 goles que marcó el año pasado en Italia. Los títulos vendrán por añadidura. "Es un honor jugar en el Barça, es un fantástico feeling ", dijo Ibrahimovic en inglés, utilizando la misma palabra con que Guardiola justificó su deseo de desprenderse de Eto´o. Joan Laporta, el presidente, quiso subrayar "el esfuerzo" del nuevo fichaje por recalar en el tricampeón. El Barça también lo ha hecho para ser, todavía, mejor.

Lo malo de todo es que el sueco tendrá que ser intervenido hoy de la fractura en la base del segundo metacarpiano de la mano izquierda, que le impedirá jugar la ida de la Supercopa de España en San Mamés. A pesar de esto, el futbolista viajará mañana con el resto del equipo a Estados Unidos. La fractura se la produjo el jugador en el último amistoso que disputó con la camiseta del Inter de Milán. Fue durante la gira americana del club italiano y que enfrentó al Inter y al Chelsea.

INVASION DE CAMPO Hubo un momento en que la figura de Zlatan Ibrahimovic, a pesar de sus 1.95 metros de estatura, se perdió ayer entre la marabunta del Camp Nou. De repente, quedó encerrado entre los miembros de seguridad del club, perseguido por centenares de aficionados y tuvo que salir por piernas del campo. Literalmente. En un instante, y tras momentos de caos, el delantero sueco se refugió en el túnel de vestuarios, anodadado por lo que acababa de vivir. Lo nunca visto en el Camp Nou.