"Ganamos como equipo y perdemos como equipo", se cansaron de repetir en Ferrari, mientras Fernando Alonso lloraba de rabia en el box , consolado por Luca de Montezemolo, mientras Stefano Domenicali pensaba en "dimitir".

Alonso y Ferrari habían perdido el título de una forma inesperada, en un error infantil que apuntaba directamente al muro, al australiano Chris Dyer. El equipo no dijo una palabra a nadie, pero el mismo lunes, 15 de noviembre, después de la carrera, fulminó a Dyer como responsable último de aquella decisión, de aquel momento en el que Alonso entró en box demasiado pronto, en la vuelta 16, para cubrir a Mark Webber, y cedió cualquier opción de ganar el Mundial enganchado tras la estela de Vitaly Petrov. Justo un año después, el ingeniero busca trabajo en la F-1 sin suerte.

"Está en otras funciones en Maranello", decían los jefes de Ferrari sobre Dyer en la tradicional convivencia de pretemporada en Madonna de Campiglio. Nadie sabía que había sido de Dyer. Meses después, se supo que había regresado a su Australia natal y se entretenía en las carreras de pick up , su primer destino como ingeniero de competición.

En septiembre, tiró de antiguos contactos en Italia para conseguir un pase de invitado en el paddock y llegar a los equipos en Monza. Puede sonar raro, pero resulta complicadísimo tener un pase de paddock , incluso para un reciente exingeniero de Ferrari. Así que Dyer se fue dejando ver en cada camión pidiendo trabajo, especialmente en el de Mercedes, después de saludar a Michael Schumacher, del que fue ingeniero de pista en el 2003 y el 2006.

"Mira, somos un equipo y tomamos decisiones como equipo, pero al final yo tenía la responsabilidad del grupo de personas que toman las decisiones, así que al final el jefe siempre es el responsable y fue mi responsabilidad", reconoció Dyer al diario Marca . Delgado, muy delgado, casi demacrado, prefirió no rebuscar en la herida. Desvelar secretos no es la mejor carta de presentación para buscar trabajo en la F-1. La temporada se acaba y él continúa con su peregrinación.