Ismael Díaz afirmó a la conclusión del enfrentamiento que su equipo "mereció más", aunque achacó "a la inmadurez y mala suerte" el resultado adverso.

"Tuvimos ocasiones para sacar algo de aquí pero un gol tonto en la primera parte fue decisivo. Estuvimos a un paso, como nos ha sucedido en otros partidos, pero no pudo ser y hay que seguir trabajando", agregó el entrenador del Cacereño.

Díaz, que consideró que hubo un penalti a Tete en los últimos minutos, dijo que el Cacereño "metió dudas" al Vecindario en la segunda parte, cuando mejor jugó. "Ese dominio fue más por méritos nuestros que por errores de ellos. Sabíamos que al Vecindario no se le podían conceder metros e hicimos un buen trabajo pero nos vamos con esa sensación de que nos faltó poco para sumar", añadió.

También lanzó un mensaje de optimismo: "Aún queda competición para remontar y debemos continuar en esta línea, dada la juventud de la plantilla y el presupuesto del club".

Benigno Sánchez, técnico del Vecindario, recordó que su equipo pudo "sentenciar" antes del descanso, aunque no lo hizo "y eso derivó al sufrimiento".