Ismael Díaz, técnico del Cacereño, aseguró que el triunfo de ayer se produjo "desde el convencimiento y ante un equipo grande, que a pesar de las adversidades fue un gran rival".

Para el entrenador asturiano el de ayer fue "el regalo de cumpleaños que me habían prometido mis jugadores", dijo. Destacó también el debut del joven Alvaro y que los tres puntos servirán para mejorar "la higiene mental del equipo que tanto necesitábamos".