La final de la Copa del Rey tuvo dos caras extremeñas, pero con muy distinto signo. El almendralejense Ito obtuvo su primer título y fue uno de los artífices del éxito del Espanyol en la final que se disputó el miércoles en el Santiago Bernabéu (4-1). El lado amargo fue para el guardameta del Zaragoza César Sánchez. El cauriense encajó tres de los cuatro tantos que recibió su equipo y perdió así su tercera final copera en su carrera deportiva.

César además cerró su actuación de una triste manera al ver la segunda cartulina amarilla y ser expulsado en el minuto 74. El de Coria perdió los nervios cuando su equipo perdía ya por 3-1 y apenas le quedaba tiempo para la remontada. Tras ser objeto del lanzamiento de varios objetos, el guardameta respondió lanzando una botella de plástico a los seguidores del Espanyol que se encontraban tras su portería. De esta manera, dejó a su equipo en inferioridad numérica y la portería maña tuvo que ser cubierta por Valbuena.

DECEPCION MAÑA César dijo sentirse abatido a la conclusión del encuentro y llegó a decir: "No me quedan ganas de jugar más". "Pido disculpas a mis compañeros y a la afición" por haber dejado a su equipo con diez jugadores por un "calentón", que le hizo ver su segunda amarilla.

"Ha sido una lástima haber llegado hasta aquí y perder la final de esta manera, sobre todo por los 35.000 aficionados que han venido desde Zaragoza", añadió.

El portero del equipo maño calificó de "varapalo" la derrota, pero lamentó su primera amonestación, por perder tiempo. "No la he entendido", concluyó.

ITO, EUFORICO El jugador de Almendralejo fue uno de los animadores ayer en la celebración del título copero. Ito estuvo 60 minutos sobre el césped del Bernabéu y realizó un papel destacado hasta que fue sustituido por Coro, que sería el autor del cuarto y definitivo tanto.

Ito tuvo un papel muy serio en la defensa de Alberto Zapater, ofreciendo su rostro más batallador y contundente. El centrocampista no se relaja a pesar del éxito y ya piensa en dar continuidad al equipo blanquiazul en la Liga, donde vive una situación delicada por abajo.