Lo ha peleado y, aunque con apuros, lo ha conseguido. Javier Cienfuegos ya logró el billete para Río y ahora está el segundo objetivo en liza. Hoy, a partir de las 14.40 horas, el montijano perseguirá su meta soñada: alcanzar la final olímpica de lanzamiento de martillo.
En teoría, el deportista extremeño no parte entre los más importantes martillistas del panorama, pero sueña con hacer un buen tiro, superando los 77 metros, con récord nacional incluido, lo que podría suponer estar en la pomada de los más grandes. Será complicado, pero hay falta de presión para el lanzador. Esa es la principal baza que jugará ante la élite mundial.
Aún tendrá más oportunidades, en su madurez como deportista de élite, pero el espíritu de Cienfuegos apunta a inquebrantable, y por ello no se puede descartar en absoluto que pueda tener su día ante lo más granado del lanzamiento mundial.
