En la noche del jueves, celebró asamblea ordinaria de socios del Jerez con la presencia de 50 aficionados. Había varios puntos importantes en el orden del día, destacando sobre todo la elección de presidente, ya que el actual, Luis Amaro, había terminado su ciclo al frente de la entidad al haber permanecido en él cinco años y sentirse, según las propias palabras del dirigente, "un poco quemado".

Hoy por hoy, se cierne como una gran incertidumbre cuál va a ser el futuro del club, ya que de momento no hay nadie que se haya presentado para hacer el relevo a Amaro.

De momento, para el próximo jueves se ha convocado otra asamblea para ver si alguna persona está dispuesta a asumir el club. El Jerez arrastra un déficil pequeño de 5.494 euros, pero el propio Amaro ha dicho que "no sería éste un problema, ya que estamos dispuestos a dejar el club a cero a la persona que se presente".

UN MES PENDIENTE Otro dato destacado es que a la plantilla se le adeuda el mes de mayo y algún dinero más en concepto de primas, aunque en ningún caso con cifras astronómicas. "Son cantidades insignificantes, pero quizá puede haber algún jugador que denuncie al club y que se pudiera descender a la Regional Preferente", dijo también Luis Amaro, que prefirió, ante todo, mostrar una cara optimista ante el futuro.

También alabó el esfuerzo realizado por la plantilla y cuerpo técnico por todos los problemas que se han tenido que solucionar y resaltó que lo más importante ahora es que haya alguien que asume el club y no se venga abajo este histórico del fútbol extremeño, que fue fundado en el año 1969 y que durante mucho tiempo militó incluso en la Segunda División B, siempre con presupuestos muy modestos.