JEREZ: Ramón Sánchez; Tián, Iraola, David Prieto (Alfonso, M. 55), Marcos Suárez, Zamorano, David, Izquierdo, Fito (Raúl Pichardo, M. 55), Manolo y José Mari (Sául, M. 76).

LINARES: Oscar Benito; Castro, Nono, Rico, Escudero, Ramiro, Luque (Sergio, M. 91), Candela, Melo (Soto, M. 84), Laguardia (De León, M. 73) y Serrano.

ARBITRO: Lesma López (Comité Madrileño). Bien (2). Amonestó a los locales Zamorano, Izquierdo y Tián y a los visitantes Ramiro, Soto, Serrano, Nono y Laguardia.

INCIDENCIAS: Tarde fría y nublada en Jerez de los Caballeros. Los presidentes de ambos equipos y el alcalde jerezano estuvieron en el palco.

El Jerez no pudo cosechar su tercera victoria consecutiva y segunda en casa y despidió el año 2002 en la Ciudad Deportiva con un empate sin goles ante el colista. Un equipo el jiennense que no tiró ni una sola vez entre los tres palos hasta el punto que el guardameta local fue un espectador más.

El partido en sí fue bastante malo, sobre todo lo que fue la segunda parte. En el primer tiempo los jerezanos, aunque no jugaron bien, tuvieron en los primeros minutos alguna ocasión clara de peligro. Como la del minuto 5, en la que José Mari se queda sólo ante el meta visitante y no acierta a inaugurar el marcador. Sólo un minuto más tarde una cesión del zaguero Escudero no la aprovecha Fito y el cancerbero finalmente despeja el balón tras la cesión de su compañero. Seguían insistiendo los jerezanos y al filo de la media hora un centro de David desde la derecha lo remató Fito de cabeza y detuvo el meta visitante.

En el minuto 36 el interior derecho Luque se marcha por la banda derecha buscando un rematador pero se interpuso en su camino Marcos Suárez enviando el balón a córner.

NUEVAS OCASIONES LOCALES

Antes del descanso, en el 41, una falta que lanza Manolo, un libre indirecto, sale rozando el poste derecho de la portería visitante.

Ya en la segunda mitad sólo cabe destacar un libre indirecto que lanzó Manolo (m. 51) que toca Zamorano de cabeza y para el meta visitante. Y es que el segundo tiempo fue un querer y no poder del Jerez que se encontró con un equipo que vino a buscar algo positivo porque no dejaba ni un hueco y que se dedicó a perder mucho tiempo.

El aburrimiento fue la tónica general del segundo tiempo en el que no hubo más ocasiones de peligro en todo el partido. El portero del Jerez no tuvo trabajo en este segundo tiempo y los locales ayer en las jugadas a balón parado no estuvieron acertados como en otras tardes. Al final lo importante es que el Jerez no perdía y sumaba un punto más que le mantiene invicto en su estadio, donde aún no conoce la derrota.