El delantero centro titular del Cacereño, Joaquín, es la gran duda para el encuentro de mañana frente al Extremadura. No se ha recuperado por completo de su pequeña rotura fibrilar en un gemelo y hoy será sometido a nuevas pruebas para saber si puede estar disponible en el primer derbi de la temporada.
Joaquín ya fue baja la semana pasada ante el Vecindario e Ismael Díaz tuvo que recurrir a Sergio en el once inicial. Al entrenador verde le ha surgido además la preocupación de la faringitis vírica que sufrió en la noche del jueves el defensa Guy, aunque se espera que pueda ser alineado ante los azulgranas.
COBOS VUELVE A CORRER
Baja segura para la cita es Julio Cobos, que durante esta semana ha reanudado los entrenamientos tras su luxación de clavícula. Sin embargo, aún se resiente cuando tiene contacto con el balón, por lo que al menos le quedan otras dos semanas fuera del equipo. Sus ejercicios se limitan a la carrera continua y no se quiere precipitar su regreso.
Los demás jugadores están bien, incluyendo Enrique, que entrena con normalidad. Según Díaz, se encuentran "animados" ante el encuentro de máxima rivalidad que se avecina. "Estamos muy convencidos de lo que estamos haciendo y vamos a ir hasta el final, pero el fútbol tiene estas cosas. El Extremadura sólo lleva tres puntos más que nosotros y además está fuera de la Copa del Rey", afirma el técnico.
