Los sueños están para cumplirse. Y muchos lo hacen. Es el caso de José Antonio Ruiz, un almendralejense de 37 años que de niño soñó primero con jugar en el Extremadura y, por qué no, ser después su entrenador. De momento, ambos sueños cumplidos.

Con una insultante cara de felicidad, Ruiz apareció por la sala de prensa del estadio Francisco de la Hera con chándal de equipo y el dinamismo en su cuerpo que siempre le ha caracterizado. Saludó a los compañeros de prensa y a los empleados del club. Todos casi de familia. Él sabe muy bien qué es el Extremadura y cómo es este club por fuera y por dentro. «Es la oportunidad de mi vida. Tengo el respaldo del presidente y del director deportivo y creo que estamos capacitados. Si no lo estuviera, sería el primero en decir que no vendría al primer equipo», comentó.

No han pasado desapercibidas sus buenas actuaciones como técnico del filial y eso ha sido el detonante para que esté ahora como primer entrenador del equipo en Segunda B. «Nunca hay un momento ideal para un entrenador. Yo soy una persona agradecida. Podemos aportarle al equipo las señas de identidad que queremos».

Ruiz, que ha tenido una gran relación con Manuel Mosquera, también dedicó al gallego unas palabras: «Era un entrenador súper respetado en el vestuario. Su trabajo ha sido fantástico. Es posible que haya cosas que mantengamos porque funcionen bien, pero está claro que queremos impregnarle al equipo la manera que nosotros tenemos de ver el fútbol».

Ruiz habla siempre en plural porque entiende que en el fútbol profesional «no hay un entrenador y los demás, sino que es un grupo» donde tiene que existir el consenso.

Sobre la manera de jugar que tendrán sus equipos, el almendralejense tiene claro que «son conjuntos que han de tener claros los automatismos ofensivos y defensivos. Nuestra intención es que el equipo siempre llegue en las mejores garantías para el domingo y que compita de la mejor manera. Aquí lo que se pretende es ganar partidos».

Explicaciones

Acompañó a Ruiz el director deportivo, Daniel López Ramos, al que se le pidieron explicaciones por la destitución de Manuel Mosquera. «Se toma en base a una valoración. Creemos que el equipo puede dar un mayor rendimiento y se buscaba lo mejor para el grupo».

López Ramos considera injusta las críticas recibidas hacia su figura y la del presidente por las formas de despedir a Manuel Mosquera. Desveló que Manuel quería que lo llamara el presidente y que no atendía las llamadas telefónicas de López Ramos. Además, devolvió al gallego los dardos que lanzó en su despedida. «Opino que tenemos una muy buena plantilla para hacer un buen equipo. No creo que el equipo esté cogido con pinzas», algo que dijo Manuel hace dos días.

López Ramos no dio más explicaciones de lo que sucede en el entorno deportivo del club ni de los jugadores a los que no se le ha podido tramitar la ficha, cuestiones que siguen sin resolverse de cara a la afición del Extremadura, que no comulga para nada con el director deportivo actual.

La plantilla se ejerce por la mañana durante estos días antes de jugar el domingo ante el Villanovense. Ruiz tendrá las bajas de Sergio Gil, Toribio y Jilmar lesionados para ese partido. Queda por saber si seguirá contando con jugadores del filial.