Convertido en la voz del presidente Félix Campo en la capital cacereña, Juan Ojalvo analiza el inicio liguero del Cacereño y asegura que el ascenso es el objetivo de la temporada.

--Cuatro victorias, un empate y dos derrotas. ¿Era lo que esperaba del equipo en este arranque de liga?

--Era muy difícil estar arriba, pero tampoco pensábamos que íbamos a perder de una forma tan estrepitosa en Olivenza. Marcó un antes y un después porque llamé la atención a los jugadores. A partir de ahí, el equipo ha cambiado.

--¿Piensa en refuerzos?

--La puerta no se ha cerrado. A medida que vaya transcurriendo la liga, si vemos que es necesario, se traerá lo que haga falta. La idea del presidente y de todos es meternos entre los cuatro primeros.

--¿Félix Campo quiere subir?

--Sí, está animadísimo. Ha visto al equipo, ve que los chavales lo dan todo y se ilusiona.

--¿Cómo están las relaciones con el ayuntamiento?

--Bien, lo único que esperamos es alguna subvención. Queremos hablar con el alcalde y estamos esperando a que nos reciba.

--El concejal de Deportes afirmó hace unos días que el equipo "se estaba arrastrando"...

--Me sentí molesto porque dijo que el Cacereño estaba desprestigiando a la ciudad. No es así porque cuando un equipo da todo lo que tiene no desprestigia a nadie. Y menos a sus dirigentes, porque tratamos de hacer lo posible para que el equipo esté bien. Además, lo que dice Lázaro García no es verdad porque no ha visto al equipo este año. No entiendo sus críticas porque es amigo y se le aprecia en el club.

--¿Qué hay de cierto en los contactos para vender el club?

--No hay nada de nada porque Félix Campo no vende.

--¿Ni siquiera lo ha pensado?

--Cuando llegó la carta del grupo francés, el presidente dijo que la rompieran porque no servía para nada.

--La afluencia de espectadores al estadio es muy escasa...

--Sí, es cierto, pero todavía se están haciendo socios.