Aunque supongo que a estas alturas la plantilla azulgrana habrá calibrado posturas y que, como promete, no habrá daños colaterales, la del Extremadura no es la mejor forma de llegar a un partido. Lo de las culpabilidades va por barrios y al final le tocará al empedrado, como siempre. Pero hay actitudes llamativas. Si es cierto que Nieto improvisó en la reunión del lunes y amenazó con irse y cerrar el chiringuito, comete una falta de responsabilidad absoluta. Eso debió de pensarlo antes de volver. Pero su ego le pudo. Más le valdría atajar la crisis ya y no volver a representar el papel de reyezuelo, inaccesible y apagando teléfonos. Porque para esto...

*Periodista