La Audiencia Provincial de Madrid justifica su decisión de reabrir parcialmente la llamada Operación Puerto contra el dopaje en la necesidad de investigar si hubo riesgo para la salud de los ciclistas a los que trataron los doctores Eufemiano Fuentes y José Luis Merino Batres.

En un auto al que ha tenido acceso Efe, el tribunal explica que de las declaraciones de estos dos médicos y de su supuesto "correo", el exciclista de montaña Alberto León Herranz, "nacen dudas suficientes sobre si las técnicas de almacenamiento, conservación, transporte y suministro de los derivados hemáticos (durante la investigación se hallaron bolsas de sangre) fueron correctos".

La sala también se pregunta si el material utilizado para esa conservación y transporte era el idóneo, y añade: "puede pensarse en los más variados incidentes, desde un corte de energía eléctrica hasta un atasco de tráfico". La sección quinta de la Audiencia de Madrid se refiere asimismo a "una enigmática frase" contenida en un informe del Instituto Nacional de Toxicología sobre los niveles de eritropoietina -medicamento contra la anemia empleado para el dopaje y conocido como EPO- encontrados en las muestras de plasma y sobre los efectos de su transfusión a quienes no lo necesitaran.

"Probablemente, la administración a personas que no lo necesitaran, dados los niveles hallados, no tendría efecto alguno. Ahora bien, consideramos que podría tener mayor riesgo las administración del propio plasma o de las bolsas de sangre por sí mismas", dice el informe.[subtitulo1.145]

La Operación Puerto revivirá un nuevo episodio en la Audiencia de Madrid