Manuel Pellegrini tiene un problema menos y una preocupación más, pero de esas que gustan a los entrenadores. Kaká regresó ayer a los entrenamientos e incluso tocó balón y disparó a portería. Lo que le inquieta al técnico es el primer encuentro tras el parón navideño ante el Osasuna, en Pamplona. Mientras, desde Alemania se insiste en que el Madrid volverá a intentar el fichaje de Ribéry, jugador del Bayern Múnich, por el que ofrecería 50 millones de euros.

"No me duele. Estoy bien". Con esas palabras abandonaba Kaká el ensayo matinal de ayer. El brasileño alargó su puesta a punto sobre el césped para intentar entrar en la convocatoria para el encuentro ante Osasuna. Otra buena noticia es que Guti abandonó el gimnasio y saltó al césped junto a Van Nistelrooy y Albiol, los otros tocados. Pellegrini tuvo que echar mano de dos canteranos antes las ausencias de Higuaín, Gago, Sergio Ramos, Arbeloa y Casillas, con un día más de descanso y que se ejercitaron por la tarde, aunque no lo hicieron por la mañana. Disfrutaron de un día más de descanso por disputar el partido amistoso de Argentina contra Cataluña, Higuaín y Gago, y por jugar el encuentro benéfico ´Champions for Africa´.

Kaka, aquejado de una pubalgia que le mantiene alejado de los terrenos de juego desde el pasado 29 de noviembre tras el partido frenta al Barcelona, está ultimando su recuperación para poder llegar al partido del Reyno de Navarra.

METZELDER Mientras, Metzelder confirmó su intención de seguir en el club hasta junio. El central alemán no juega desde el pasado 27 de octubre cuando el Madrid cayó en Alcorcón en Copa. "Voy a cumplir mi contrato y luego ya veremos. Soy realista y no creo que me renueven. Ya sabía que este era un club difícil", dijo el defensa, que aseguró que iría en un coche conducido por Benzema, "pero le diría que fuera tranquilo". Metzelder también tuvo palabras de cariño para Guti, al que calificó como "un jugador que trae un buen ambiente al vestuario".