El francés Karim Benzema completó el póquer de ases iluminados por los focos del escenario erigido en pleno césped del Santiago Bernabeu, alentado por los estruendos de ilusión que han levantado el ánimo de la afición blanca, ávida de ánimo tras un año de decepción. Benzema representa la pólvora en el nuevo proyecto de Florentino Pérez. La opción de gol elegida por el flamante gobierno madridista. El que liderará el ataque del conjunto del técnico chileno Manuel Pellegrini. Ya forma parte de una galaxia explosiva de medio campo hacia adelante.

El delantero galo, reputado por su origen argelino como Zinedine Zidane, su procedencia de un fútbol talentoso y su similitud, en las formas, con el brasileño Ronaldo, completó la programación de pomposas y espectaculares presentaciones. Desde ahora, y aunque no se descartan nuevas estrellas bajo el telón blanco en los próximos días, el trabajo centrará la atención de la plantilla. Echa a andar desde mañana, viernes. Incluido Benzema, sin vacaciones extras como Kaká o Raúl Albiol, que disputaron la Copa Confederaciones con Brasil y España. Tendrá atención el francés. Aunque la mayor parte de la repercusión se la lleve el luso Cristiano Ronaldo.

Pero el ruido ya no faltará alrededor de un futbolista que aún es más lo que promete que lo que es. Con veintiún años (en diciembre tendrá 22), el futbolista francés derrocha talento por los cuatro costados, garantiza goles y emprende una alentadora entrada en un devenir inmenso. Sólo pendiente de demostrar si mantendrá la estabilidad a las incesantes exigencias de una entidad como el Real Madrid. Benzema pretende mantenerse fiel a las exigencias que generó desde su irrupción en el fútbol profesional, a los 17 años. Cuando amarró con firmeza la oportunidad que le proporcionó el Lyon debido a una lesión del brasileño Fred. Ya no desapareció de ahí.

Su aparición fue una bendición en el fútbol francés, amenazado seriamente con el declive, víctima del paso del tiempo, de sus principales jugadores referencias. Llamado a marcar una época por su temprano surgimiento, fue el representante de una prometedora hornada de futbolistas franceses que no han abarcado la mayoría de las expectativas generadas en sus inicios. De hecho, Benzema no salió beneficiado de la última Eurocopa. El delantero francés no ha sido capaz de desmarcarse del evidente declive del Lyon ni de la inestabilidad del equipo nacional francés, en plena repercusión. Ese vaivén ha perjudicado su despegue.

Intenta Karim Benzema, de origen argelino igual que Zinedine Zidane, prolongar las excelencias de los representantes de la línea de vanguardia 'blue'. Las que han marcado las diferencias en el fútbol mundial. La que representan Thierry Henry, David Trezeguet, Nicolas Anelka, entre los más recientes. Ya de vuelta en sus respectivas carreras. El nivel despedido por el nuevo jugador del Real Madrid ha incentivado el debate en Francia. La fuerza con la que entró en escena en sus comienzos le llevaron a ser conocido como el 'Ronaldo europeo'. De gran potencia, enorme zancada, solvente con las dos piernas y de notable velocidad, suele buscar la opción más adecuada para estrechar su relación con el gol. Perenne en el área.

Karim Benzema es la penúltima estrella en la galaxia blanca. Una nueva etapa en una carrera meteórica, plagada ya de éxitos y reconocimientos. Un principiante de estrella que compartirá honores con astros consolidados. Con una terna de ensueño. Al lado, por ahora, de Kaká y de Cristiano Ronaldo.