Con solo 30 años se ha convertido en una de las novedades de la Tercera extremeña para la próxima temporada, el miajadeño Carlos Pizarro Delgado (25-01-1989) bien podría haber sido protagonista del famoso anuncio de los 90 en el que se usaba el término ‘JASP’ (Joven Aunque Sobradamente Preparado). Ha sido precoz en llegar al fútbol de los más mayores, pero antes ya sabe lo que es ganarse el pan fuera de la tierra, primero en Sevilla y después en Kuwait, experiencia vital no le va a faltar para intentar volver a consolidar al Miajadas en el grupo XIV.

«La verdad es que tengo mucha ilusión con esta temporada, creo que soy el más joven que va a estar ese año, el año pasado ya era el más joven de la Preferente y afronto todo con muchas ganas», asegura el entrenador miajadeño, que como curiosidad este año ha entrenado a varios jugadores más mayores que él. Esta temporada has sido la primera como primer entrenador en el club de su localidad después de dos años como ayudante de Kiko Garrido. La directiva apostó por él y en su primer intento ha conseguido sacar al conjunto tomatero de la Primera División Extremeña. «Ahora queda seguir creciendo, con muchas ganas e ilusión por hacer las cosas bien».

El Miajadas ha sido un equipo clásico del fútbol regional, Carlos Andújar, Toni, Rai, Juanjo Chavalés, Miguel Ángel o Jair Amador han vestido la zamarra roja. Ahora toca volver a la tercera con el objetivo de salvarse y seguir creciendo. «Nadie nos ha regalado nada y vamos a pelear por mantener el proyecto en esta división y seguir creciendo», sostiene su técnico.

Pasado en el Golfo Pérsico

La carrera de Carlos Pizarro ha sido rápida. No jugó en Tercera ni Segunda B pero apostó desde joven por formarse e ir creciendo como entrenador. Con 26 años ya entrenaba en la AD Nervión, un equipo vinculado al Sevilla, también lo hizo en el Círculo Don Bosco y en Centro Histórico. Una buena temporada en la capital hispalense y el hecho de conseguir el título de entrenador nacional tan joven le abrieron las puertas del Al Khaitan SC kuwaití en la temporada 2015-2016, una experiencia llena de contrastes. No se lo pensó, hizo la maleta y allí estuvo una temporada que no olvidará. «Todo es muy diferente, teníamos unas infraestructuras impresionantes, pero les falta cultura futbolística. Nuestro estadio albergaría a unas 20.000 personas pero nunca había más de 500».

Ahora todo ese bagaje en lo personal y en lo futbolístico se verá plasmado en el equipo de su pueblo. Sabe que este año la Tercera va a ser competitiva pero avisa que no va a renunciar a su estilo. «Es mi manera de entender el fútbol, con el balón, con mucha intensidad y muy ofensivos».

Un estilo que ya ha podido verse en la Primera Extremeña y que ha conseguido despertar otra vez a la afición miajadeña, de la que espera seguir teniendo el mismo apoyo: «Ha sido fantástico ver el campo lleno o ver que centenares de personas te acompañan en un partido fuera de casa».

Su juventud en el campo no es más que el reflejo de una directiva también joven que ha conseguido devolver a la entidad tomatera al grupo XIV. De hecho ya ha hecho públicos los abonos para la temporada que viene, 90 euros para los que lo adquieran antes del 31 de julio y 100 para los que tarden más. Además al fichaje de Juanra Díez y a las renovaciones de Álex Jiménez, Rubén Tena y Fale, se han sumado en los últimos días las del portero Rosiña y el lateral Charly.

Un equipo cargado de ilusión, como la que tiene este joven entrenador que hace años se planteó llegar a la Tercera antes de los 35, de momento va «sobradamente» adelantado.