Ricardo Fernández Montaño, entrenador del Mérida, comenzó destacando que "lo suyo hubiera sido ganar e hicimos todo lo posible. El reparto de puntos no me deja buen sabor de boca, porque quizá tuvimos más llegada en un típico derbi".

Fernández insistió durante su intervención en que el mal momento de su equipo se debe a la ansiedad. "La ansiedad por hacerlo bien nos pesa. Todo el mundo quiere dar el último pase y no todos pueden".

Por último, Fernández dijo estar capacitado para sacar al Mérida del descenso. "Cuando no esté capacitado, me iré. Este equipo va a más, pero necesita un buen resultado fuera. Si nos ponemos nerviosos...".