"El equipo ha tenido una desconexión en el último cuarto incomprensible y demasiado fuerte". Manuel Hurtado, entrenador del Cáceres 2016, no vio "falta de actitud ni de físico" en el hundimiento de su equipo en la segunda parte tras una derrota que calificó como "hiriente". Habló más bien de factores "anímicos", de que sus jugadores se pusieron "demasiado nerviosos". Incluso halagó el juego desarrollado durante la primera parte, "el 75% de lo que podemos hacer". Después, las interrogantes. "Lo que único que nos queda es trabajar y analizar las claves de lo que ha pasado", apuntó. También aseguró que a él no le corresponde decir por qué su equipo juega mejor fuera que en casa. "El público tiene derecho a decir lo que quiera", apostilló.

Paco Aurioles, entrenador del Clínicas Rincón, destacó que su equipo estuvo "soberbio" tras el descanso, sobre todo "Díaz y Movilla".